Pocas personas hay en Catalunya que caigan tan bien, de manera tan unánime, como él. El yerno que todas las madres querrían, cara de buen chaval y de no haber roto nunca un plato, de aquellos que te llevarías a casa sin pensártelo. Sonrisa socarrona, de travieso, pero de buena pasta al mismo tiempo. Un tipo que desde que sacó la cabeza delante de las cámaras, no ha parado de hacer cosas, con algunos papeles icónicos. Apareció en nuestras vidas el año 1997 gracias al filme "Carícies", de Ventura Pons, pero hoy todo el mundo lo conoce como el entrañable 'Ivan' de Com si fos ahir de TV3, que ya hemos visto que no se casa. Hablamos de Roger Coma, que ha pasado por los micrófonos de El suplement de Catalunya Ràdio.

Roger Coma a 'Com si fos ahir' TV3

Coma, que también ha dado vida a otros personajes icónicos, como el Roger Brunet de Porca misèria, nos han hecho reír, llorar, disfrutar y sufrir. Y en la conversación en la emisora pública catalana, ha hecho reflexiones interesantísimas sobre el catalán y qué piensa él, que se define como "Soy la catalanidad hecha persona". Hablando sobre el uso del catalán y en qué situación se encuentra nuestra lengua, se ha sincerido: "El idioma vehicular del patio, de uno de los niños es el castellano y del otro, el catalán, entonces... tengo que respirar, tengo que respirar, porque tampoco me puedo meter de una manera excesiva, porque a veces también, una cierta manipulación allí dentro es tóxica y te puede salir el tiro por la culata". Cuestionado sobre si le preocupa la situación del catalán, lo tiene claro. Rotunda respuesta: "Muchísimo. Me preocupa, me es dolorosa, me duele, me lo paso mal realmente y me amarga el día".

Reconoce, hablando sobre como de rara avis son algunos actores que se pronuncian abiertamente y orgullosos de su catalanidad, su lengua y la voluntad de independencia, que "todavía me hubiera podido pronunciar más sobre el catalán, encuentro, porque me he pronunciado cuando lo he necesitado y cómo he sido. Te haces mayor y piensas, en el fondo, estos miedos y esperar que todo el mundo te puede contratar por cualquier cosa, esta cosa vendida que tiene nuestro trabajo, en el fondo es muy indigno para uno mismo. Llega un momento que tienes que ser fiel a lo que sientes, porque si no, no te vas a dormir tranquilo".

"¿Cierra puertas pronunciarse? Sí. Pero creo que está bien, hay que potenciar la diferencia. Todo el mundo tiene los mismos referentes, estamos todos mucho homogéneos y preparados para lo que sea. Tenemos que ser honestos en lo nuestro". Un Coma que cuando llegó de Banyoles, donde todo era catalán, a Barcelona, se sorprendió, "pero en aquel momento no encontraba el riesgo y la peligrosidad de ahora. Ahora la cosa está muy crítica".

Escuchen la conversación, vale mucho la pena.