Sara Sálamo es una magnífica actriz canaria que ha participado en diferentes serie como B&B, de boca en boca, Arrayán o Brigada Costa del Sol, o en películas como Todos lo saben o el último éxito incontestable en taquillas de Santiago Segura, ¡Atodo tren! Destino Asturias.

Sara Sálamo / @sarasalamo

Pero parece que su currículum profesional no es suficiente como para que le comenten cosas al respecto, que siempre habrá quien querrá hacerse el ocurrente, por no decir que querrá hacerse el imbécil, y le haga algún comentario soez, desagradable o directamente vomitivo sobre su físico.

La intérprete de Santa Cruz de Tenerife no es la primera ni será, lamentablemente, la última vez que tiene que denunciar públicamente los comentarios machistas que le hacen algunos sobre su cuerpo o sobre su persona. Especialmente abyectos fueron los vergonzosos insultos que recibió hace tiempo cuando algunos aficionados al Real Madrid la acusaron de ser la razón por la cual su pareja, el jugador Isco Alarcón, no estaba teniendo un buen rendimiento con la camiseta blanca:

Por desgracia, Sálamo a menudo recibe mensajes asquerosos tan o más lamentables como estos. A menudo la actriz tiene que leer estupideces de "señoros", como ella les dice, que se creen en posesión del derecho de palabra y de decir lo que les salga de allí a cualquier mujer que ellos quieran. Pero la cosa no va así. O no tendría que ir así.

Por eso, a la mínima de cambio que hay algún desgraciado que traspasa líneas rojas, Sálamo le para los pies y lo denuncia en redes. Como ha vuelto a hacer.

Sara Sálamo / @sarasalamo

Esta última foto en blanco y negro que ven es la última que ha publicado la intérprete en su cuenta de Instagram. Acompaña la imagen con una frase socarrona, "en Argentina lo llamarían 'hacerse la canchera'", es decir, dárselas de superioridad, persona que puede con todo y lo hace con actitud de soberbia. Una autoparodia que ella misma se atribuye dada la imagen y la actitud que se desprende.

Pero donde piensa mostrarse siempre inflexible y retadora es en redes, y bien que hace, ante de cualquier muestra de machismo. El ejemplo más paradigmático, el último tuit que ha escrito. Se ve que hay quien se permite el lujo de "preguntarme por Instagram el motivo por el que tengo el pecho más caído". ¿Y qué les ha respondido ella a los que tienen esta duda existencial? Una frase de traca, épica, descomunal. Un sopapo MARAVILLOSO con la mano abierta:

Sublime. Como ella misma dice, "Denuncio estas cosas con el único fin de hacer entender que NO es normal escribir este tipo de cosas a nadie… Que si no es bonito hacerlo a alguien con quien te encuentras en un paso de peatones, tras la pantalla: TAMPOCO". Toda la razón.

Por cierto, lo que también tienen por el suelo estos machistas, aparte de la piel del escroto, es la decencia moral.