La actriz Sarah Hyland, que en la exitosa serie 'Modern family' interpreta el papel de Haley Dunphy, va por el camino de ganar en popularidad a quien hace de su tía en la ficción, una de las actrices más reconocidas de la televisión, Sofia Vergara. La joven actriz es toda una 'influencer' y su Instagram cuenta con más de 6 millones de seguidores. Hace poco celebró su cumpleaños publicando una foto desnuda en un hotel de lujo en las islas Vírgenes Británicas: "Nadando desnuda sobre el océano. Esto son 28 años".
Es uno de los nombres de moda de la televisión norteamericana, y más, desde que ha concedido una entrevista abriéndose en canal y confesando hechos del pasado que la llevaron a un momento crítico donde incluso pensó en quitarse la vida. Todo, por unos problemas de salud que se convirtieron en una losa difícil de soportar. La intérprete sufre displasia renal, enfermedad que la ha hecho pasar ya 16 veces por el quirófano, y eso que sólo tiene 28 años. Sus riñones no funcionan correctamente y fruto de eso le han ido apareciendo dolorosos quistes.
En el año 2012 su padre le hizo una donación de uno de sus órganos, pero su organismo lo empezó a rechazar y tuvo que someterse a un segundo trasplante de riñón, cosa que la opinión pública desconocía hasta ahora: "Cuando alguien de tu familia te da una segunda oportunidad de vivir y fracasa, casi sientes que es culpa tuya. No lo es. Pero lo piensas". Hyland se deprimió: "Durante mucho tiempo me planteé el suicidio. Me he pasado la vida siendo una carga, teniendo que ser atendida y cuidada". Estos pensamientos no mejoraron cuando su hermano pequeño accedió a darle uno de sus riñones después de ver que era compatible con ella: "No quería fallarle a mi hermano pequeño como le había fallado a mi padre".
La actriz se volcó en su familia y amigos... y en Modern family: "Mi trabajo es mi terapia. Si no fuera por la serie, no estaría aquí". A pesar de encontrarse mejor, Hyland fue diagnosticada, después del segundo trasplante, de endometriosis y de una hernia abdominal, teniendo que pasar nuevamente por el quirófano.