Malas noticias para el equipo de ‘La que se avecina’, uno de sus actores episódicos en la etapa de Mirador de Montepinar se ha colocado en el foco mediático por un presunto envenenamiento. Se trata del actor Luis Lorenzo, conocido por interpretar al dueño de Percebesa, la empresa de mariscos que competía siempre con Mariscos Recio y le quitó el codiciado Bogavante de Oro. Antonio Recio siempre tenía que escuchar que sus pescados y mariscos eran mucho mejores.
El actor y su esposa Arancha han sido detenidos como principales sospechosos del asesinato de Isabel, la tía de ella. Tal y como detalla El Confidencial, hace un año, el matrimonio invitó a la anciana a su casa de Rivas, que por aquel entonces vivía en Asturias. Sin embargo, esta visita se convirtió en una larga estancia, algo que hizo sospechar al hermano de la viuda, José, quien denunció su desaparición en un cuartel de la Guardia Civil del Principado.
José estaba muy mosqueado con la enigmática actitud de Luis Lorenzo y Arancha, que controlaron el teléfono móvil de la anciana en todo momento, de esta manera no dejaban que se comunicase con nadie del exterior por cuenta propia. Cuando el caso se transfirió a Madrid, unos agentes se personaron en el domicilio del actor para comprobar qué estaba sucediendo. Como explica El Confidencial, Luis Lorenzo abrió la puerta a los agentes con una sonrisa y aparente tranquilidad. El actor reconoció que Isabel vivía con ellos desde hace un tiempo. No obstante, no les permitió entrar sin orden judicial.
La anciana habría sido presuntamente envenenada
En junio de 2021 la anciana falleció en la casa de Rivas donde se encontraba. Se dictaminó muerte natural. El cuerpo se envió a Asturias para que fuese enterrada allí. José desconfió de los documentos oficiales y pidió que se realizase una autopsia a la anciana. La justicia aprobó la petición y se demostró que la muerte había sido provocaba por la presencia de dos metales en dosis desmedidas. Se concluyó que Isabel había sido envenenada.
Isabel ya había pasado tiempo en casa de Lorenzo y Arancha en varias ocasiones anteriores. Se habían percatado que siempre que estaba allí presentaba síntomas de demencia, que desaparecían cuando volvía a Asturias. Como habría recabado el Grupo de Homicidios de la Guardia Civil, durante esas estancias en Rivas, Isabel acumulaba unos excesivos gastos de 30.000 euros. Y curiosamente, antes de morir, la anciana realizó un testamento a favor únicamente de Arancha, a quien le dejaba unas propiedades en Asturias y unas tierras.
Con todas estas pruebas y la situación económica del actor, que no trabaja desde hace años, se tramitó una orden de registro para comprobar si había restos de estos metales en la casa de Rivas, y efectivamente, en sus móviles y ordenadores se encontró información sobre envenenamientos. Tras ese registro, el viernes 27 de mayo tanto Luis como Arancha han pasado a disposición judicial en el juzgado de guardia de Arganda del Rey, donde están declarando.