Belén Esteban se encuentra en uno de los mejores momentos de su vida, tanto a nivel personal como profesional. La colaboradora ha dado un paso más y se ha atrevido a explotar su faceta de empresaria. A mediados de este año inauguró su primera empresa, ‘Los sabores de la Esteban’. En ella se comercializan productos alimentarios. Este verano triunfó con su gazpacho y un rico salmorejo. Todo recetas totalmente naturales. Con la llegada del otoño ha ampliado la gama de artículos con varias cremas de verduras y unas patatas fritas.
La mujer de Miguel Marcos está muy feliz con el gran éxito. Hace un par de semanas pasó el fin de semana en Alemania junto a su marido para asistir a una feria de alimentación en Colonia. Sus patatas fritas están siendo todo un éxito en ventas más allá de nuestras fronteras. Se pueden encontrar en muchas cadenas de supermercados, como Día, Mercadona o El Corte Inglés, entre otras. Su empresa empezó con siete trabajadores, entre los que se encontraba Andrea Janeiro, y actualmente ya tiene más de 50.
"Estoy súper contenta, por Alemania van muy bien. Mucho éxito, mucho trabajo y mucha ilusión", confiesa sin ocultar el orgullo por el buen funcionamiento de su marca. La colaboradora no piensa abandonar la televisión, pero se está labrando un buen futuro por si algún día se acaba.
Belén Esteban muestra un notable desgaste
Belén Esteban está centrando todos sus esfuerzos en su nuevo proyecto y esto le está suponiendo ir con un mayor cansancio a ‘Sálvame’. Trabaja demasiadas horas y esto le pasa factura. Ahora tiene más responsabilidades y problemas en la cabeza. Esta sería una explicación del motivo por el que la vemos algo más ausente. Y en algunas ocasiones con algo de sueño. La de Paracuellos lleva un ritmo de vida frenético. Sus compañeros, que tanto la conocen, le han recomendado que eche el freno. Sin embargo, eso le cuesta porque ella es una persona muy trabajadora y ese es el motivo de su éxito. De momento, Belén Esteban tiene intención de llevar a cabo ambos proyectos, pero ¿hasta cuándo?
La empresa de Belén Esteban sigue su crecimiento en ascenso y cada vez tiene una mayor importancia en su día a día. Las audiencias de ‘Sálvame’ ya no son las esperadas y se nota un agotamiento en su faceta como colaboradora. Son 12 años en el mismo puesto de trabajo, todas las tardes de lunes a viernes. El desgaste está presente.