Si bien es cierto que el clan Kardashian-Jenner se ha vuelto mundialmente conocido por su presencia en redes sociales, sus programas de telerrealidad y su inmensa fortuna, el uso constante de procedimientos estéticos y cirugías plásticas también es uno de los temas recurrentes entre ellas, dado que cada una de las integrantes de la familia más mediática del mundo del espectáculo se ha sometido a varias intervenciones estéticas para mejorar su apariencia.
No obstante, hay una de ellas que ha cambiado drásticamente con el paso de los años. Se trata de Khloé Kardashian, la tercera de las hermanas, quién ha transformado completamente su cara y su cuerpo con varias cirugías plásticas, cambiando de forma drástica sus facciones naturales y su complexión física, liderando el ranking de las más operadas de su familia junto con su hermana Kylie Jenner.
La CEO de “Good American” se hizo mundialmente conocida en el año 2007 cuando protagonizó el reality “Keeping Up with the Kardashians” junto con su familia. En un principio, los seguidores del programa comenzaron a compararla con sus hermanas, dado que no se parecía en nada a ella. Además, debido a su peso, muchos seguidores del reality comenzaron a referirse a ella como “la hermana gorda”, afectando su confianza y autoestima.
Aunque por muchos años soportó las críticas, en el año 2016 decidió hacer un cambio radical en su vida, después de separarse del jugador de baloncesto profesional, Lamar Odom. Empezó a perder peso gradualmente y a tonificar su figura con una estricta rutina de ejercicios. Después de perder peso, la socialité se obsesionó con las cirugías faciales y comenzó a cambiar todo aquello que no le agradaba de su cara. Expertos afirman que Khloé Kardashian ha invertido más de 2 millones de dólares en cirugías plásticas y tratamientos estéticos para poder estar al nivel de la imagen de perfección que suele vender el imperio Kardashian.
No obstante, muchos de estos cambios fueron producto de la presión de su familia, ya que le decían que su aspecto natural no cuadraba con el resto de la familia, causando una mala imagen ante sus espectadores. A través de una entrevista en televisión que le hicieron en 2018, cuando estaba en el segundo trimestre de su embarazo, la empresaria confesó que su familia la presionó para bajar de peso. "Se sentaron todas conmigo y me dijeron que tenía que adelgazar. Que mi figura no ayudaba a mantener la marca familiar y que bajar unos kilos ayudaría también a mi imagen personal", contó Khloé. "Creo que no hay que fijarse en lo que uno dice, sino en cómo lo dice. Entiendo que me hablaban desde esa vena mánager que todos tenemos en mi familia, pero reconozco que me hirieron sus palabras".
Según informa el medio NW, Khloé Kardashian ya no recuerda la cantidad de cirugías que se ha hecho en la cara y se estima que se ha operado la nariz más de cuatro veces. La fuente también afirmó que Khloé “ha gastado cientos de miles de dólares en liposucción y varios rellenos en su trasero y muslos”.