A los 73 años, Carlos de Inglaterra ha ascendido al trono británico tras el fallecimiento de la reina Isabel II el pasado 8 de septiembre. Dos días después de la muerte de la monarca, el heredero a la Corona fue proclamado como el rey Carlos IIII. Una ceremonia televisada en la que estuvo acompañado de su hijo mayor, el príncipe Guillermo de Gales, y su esposa, la reina consorte Camilla. Desde ese momento, el nombre de Carlos III ha liderado miles de titulares a nivel mundial, hecho que no sucedía desde su sonado divorcio con la princesa Diana en la década de los 90. Ahora, después de muchos años de espera, el nuevo soberano se ha puesto al frente de una de las monarquías más famosas, antiguas e importantes del mundo. Y para ello, el nuevo rey ha decidido confiar en su equipo de trabajo y en su mujer, quien se ha convertido en la verdadera ‘jefa’ de la Casa Real al ser quien mueve los hilos del rey al aconsejarlo sobre la toma de decisiones en el Palacio.
Camilla Parker-Bowles ha sido, desde siempre, la cómplice y la confidente del rey. Además, desde que se casaron en 2005, la nueva reina consorte ha sido la encargada de aconsejar a Carlos III con todos los temas relacionados con sus responsabilidades en la Familia Real, por lo que la última palabra no la tiene el rey, sino su reina. De esta manera, Camilla estaría siguiendo el ejemplo de la Reina Madre (Isabel Bowes-Lyon), quien se convirtió en un pilar fundamental dentro de la monarquía británica durante el reinado de Jorge VI, y también durante los primeros años del reinado de su primogénita, la reina Isabel II. Así lo ha confirmado Julian Payne, ex secretario de comunicaciones de Carlos y Camilla entre 2016 y 2021, en un artículo publicado en ‘The Times’.
Payne aseguró que solo tiene buenas palabras para referirse a la nueva reina consorte del Reino Unido, puesto que la describe como el mejor nexo entre la “institución con el mundo exterior”, dado que ella, a diferencia del resto de los integrantes de la Familia Real, “ha vivido en ambos lugares”, haciendo referencia a su vida alejada de la aristocracia durante su juventud. De hecho, en el transcurso de los cinco años que trabajó junto a Carlos III y Camilla aprendió que “los miembros de la Familia Real son, por la naturaleza de su nacimiento, incapaces de salir completamente de la burbuja, por lo que se aprovechan de otras personas que puedan brindarles un contexto adicional”, siendo este el papel que cumple Camilla dentro de la monarquía.
Camilla Parker-Bowles no es la madrastra malvada de los cuentos de hadas
Gracias a su cercanía con la reina Camilla, Payne ha asegurado que la personalidad de la mujer del rey está muy lejos de parecerse a la representación de una “madrastra vil y malvada” que se hizo de ella cuando oficializó su relación con el entonces príncipe de Gales. “Es amable, empática y extremadamente acogedora”, por lo que “es uno de los miembros más populares de la Familia Real”, indicó el ex trabajador.