El hijo del mítico e icónico Camilo Sesto, Camilo Blanes, atraviesa un momento complicado en su vida. Una etapa que tiene a muchos desconcertados, sobre todo en su entorno cercano, y en la que está dilapidando dos millones de euros de la herencia que le dejó su padre.
‘Camilín’, como le han llamado muchos, tiene ahora 39 años. Y ya no quiere que le llamen Camilo. El joven está en plena transición de género y quiere que le traten en femenino. Incluso se ha bautizado a sí mismo ‘Sheila Devil’ (Sheila endiablada). Pero lo más preocupante es que no sigue ninguna indicación ni recomendación médica.
Camilo Blanes, hijo de Camilo Sesto, es ahora Sheila Devil
Una nueva personalidad con la que ya se ha dejado ver en las redes sociales, en una serie de fotos cuanto menos inquietantes. En ellas se muestra con poca ropa, luciendo pelucas y sin dientes. Un cambio de sexo que le está costando un buen dinero, como las fiestas o las compras innecesarias que realiza compulsivamente. Como apuntan muchas fuentes, las drogas le están destrozando el físico y el cerebro. Y también la muerte de su padre, que todavía no ha podido superar.
Mientras tanto, en su entorno, sobre todo su madre Lourdes Ornelas, se sienten “perdidos y desesperados”. Y es que no escucha consejos ni acepta la ayuda de sus cercanos. De hecho, hace semanas una fuente cercana a la familia señaló que Camilo Blanes (o Sheila Devil) mostraba comportamientos sospechosos y preocupantes. Aseguraba haber “presenciado atrocidades en las fiestas de Camilo Sesto”. Y que muchas personas sospechaban que el asunto no tendría buen final.
Camilo Blanes, actualmente Sheila Devil, está quemando la herencia de su padre
Por su parte, el diario El Mundo revela que Sheila recibió una herencia de dos millones de euros en activos financieros. Era el único heredero del cantante. Y a ello hay que sumar otros bienes como una mansión en Torrelodones, una casa en La Chopera o lo que gana con los derechos de autor de su padre, que rondan los 200.000 euros al año. En total estaríamos hablando de un patrimonio de alrededor de 6 millones de euros.
Una fortuna de la cual el joven estaría malgastando los dos millones de euros efectivos. Su propia familia señala que está derrochando dinero en caprichos innecesarios y cuestionables. Sin duda alguna, la historia no pinta tener un buen final. Más bien lo contrario. Del mismo modo que necesita tratamiento médico para su transición de sexo, en su entorno opinan que Sheila Devil también precisa ayuda psiquiátrica. Urgente.