A principios de los años 90, el nombre de Camilla Parker Bowles protagonizó todos los titulares internacionales tras haberse confirmado su relación extramatrimonial con el príncipe Carlos mientras él aún estaba casado con Lady Di. Y aunque Camilla terminó convirtiéndose en una de las mujeres más importantes en la vida de Carlos III, lo cierto es que no fue su única “amiga especial”, dado que él le fue infiel a la princesa Diana con más de 10 mujeres y todos en el Palacio de Buckingham lo sabían.

Según la biografía de Camilla Parker Bowles, ‘The Duchess: The Untold Story’, escrita por Penny Junor, Lady Di se enteró de que su futuro marido le era infiel con Camilla dos semanas antes de su boda, que tuvo lugar el 29 de julio de 1981. A modo de “despedida”, el rey Carlos III envió un lujoso brazalete a todas las mujeres que significaban algo para él, es decir, a todas sus amantes. Como era de suponerse, uno de los brazaletes estaba dirigido a Camilla Parker Bowles, y fue precisamente ese el que encontró la princesa Diana antes de su boda, por lo que estuvo a punto de cancelar su boda con Carlos al enterarse de su engaño. Sin embargo, en ese momento aún no caía en cuenta que Camilla era solo un nombre más de su extensa lista de conquistas.

De acuerdo con Roberto Devorik, amigo íntimo de Lady Di, ‘la Princesa del Pueblo’ le confesó, entre lágrimas, lo siguiente: “Carlos una vez le dijo: ‘Todos los príncipes de Gales debemos tener una amante’”. Lady Di no quería soportarlo más y decidió hablar con Isabel II para poner fin a su farsa de matrimonio, pero la monarca “no quería oír. Creía que exageraba sobre Camilla”. Los años pasaron y la relación entre Diana y Carlos era cada vez más tensa. Los rumores de infidelidad dentro del Palacio eran constantes, y ella ya no estaba dispuesta a soportarlo más, puesto que estaba segura que Camilla Parker Bowles no era la única mujer con la que tenía que compartir a su marido. Finalmente, el 9 de diciembre de 1992, el primer ministro John Major anunció ante la Cámara de los Comunes que Carlos y Diana se habían separado, pero habían llegado a un acuerdo para no divorciarse. Sin embargo, Lady Di no soportó que Carlos la humillara públicamente al confirmar en una entrevista televisiva que le había sido infiel.

Lady Di se reveló ante las costumbres de “infidelidad” por parte de los miembros de la Corona

De acuerdo con Rowan Pelling, editora de la revista ‘The Amorist’, “las clases terratenientes tenían actitudes elásticas hacia la fidelidad matrimonial”. Es decir, “si tu cónyuge era infiel, tenías dos opciones claras: ignorarla y darle a la jardinería, o encontrarte en silencio con tu propio amante. Lo único que no debes hacer jamás es quejarte. Eso es algo que se ve infantil. Por eso todos los amigos de Carlos desaprobaban a Diana, porque se puso como una furia al enterarse".