Nicole Kidman y Tom Cruise se convirtieron en la pareja más mediática de final de la década de los 90. La prensa amaba al actor más guapo, casado con la actriz revelación del momento. Se conocieron en la película ‘Días de trueno’. Estuvieron casados durante 11 años. Y se separaron luego de protagonizar juntos la película ‘Ojos bien cerrados’, dirigida por Stanley Kubrick. Lo que jamás imaginó la actriz australiana es que su divorcio le ayudaría a ganar su primer premio Oscar.
La pareja ha sido una de las más veneradas en Hollywood. Ambos jóvenes y exitosos, en la cúspide de sus carreras. Sin embargo, lo que por fuera parecía ser un verdadero cuento de hadas, terminó en un inesperado divorcio. “Básicamente me hizo perder el control. Me enamoré loca y apasionadamente”, confesó la protagonista de ‘Los Otros’ en una entrevista a 'Vanity Fair'.
Nadie sabe realmente las verdaderas razones detrás de la ruptura, ya que ambas estrellas eligieron ser muy discretas sobre sus malentendidos personales. La pareja adoptó una hija, Isabella Jane Cruise y un hijo, Connor Antony Cruise, sin embargo, tras el divorcio, han mantenido poco contacto con el protagonista de ‘Misión Imposible’. Aunque se ha especulado que fueron las creencias de Tom Crusie en Cienciología las que causaron una ruptura entre los dos, Nicole Kidman dijo que hubo muchas pequeñas cosas, incluida la fama, la edad y las responsabilidades, que impactaron negativamente en el matrimonio.
“Me casé muy joven, pero definitivamente no fue un poder para mí, fue una protección. Me casé por amor, pero estar casada con un hombre extremadamente poderoso evitó que me acosaran sexualmente. Trabajaría, pero todavía estaba muy encerrado. Cuando salí de eso a los 32, 33, es casi como si tuviera que crecer”, dijo la australiana, quien admitió que fue difícil superar la ruptura de un matrimonio de más de 10 años.
Pero Nicole Kidman supo aprovechar esa vivencia en su interpretación de la escritora Virginia Woolf en ‘Las Horas’. Hay que recordar la historia de la escritora británica, quien se quitó la vida en 1941, suicidándose tras una fuerte depresión. Con un abrigo, llenándose los bolsillos de piedras, se ahogó en el río Ouse, cerca de su casa. La actriz dijo que este papel no hizo más que agravar la depresión que padecía tras separarse de Tom Cruise. Lo positivo de la experiencia es que su interpretación de Woolf la llevó a ganar el Oscar a Mejor Actriz por ‘Las Horas’, donde compartió créditos junto a dos titanes de la actuación como lo son Julianne Moore y Meryl Streep.
En la escena final, cuando la escritora se suicida, la exesposa de Tom Cruise no midió el peligro de la escena que implicaba meterse piedras en los bolsillos y meterse en un lago, con la intención de ahogarse. “No sé si alguna vez pensé en el peligro. Estaba tan metida en el personaje... Quiero decir, me puse las piedras en los bolsillos y me metí en el río. Una y otra vez. Probablemente no tuve suficiente cuenta del peligro”, confesó Nicole Kidman.