Si antes conocíamos al famoso actor Dwayne Johnson por sus grandes músculos y su figura bien marcada, ahora te sorprenderás más porque luce mucho más fuerte con una masa muscular a la que pocos pueden llegar.  

‘La roca’ como popularmente es conocido, interpretó recientemente al nuevo antihéroe de DC, Black Adam. Este papel le exigió un gran esfuerzo para aumentar sus músculos hasta el infinito, y más allá. Sin embargo, Johnson tiene una serie de trucos para lograr tan impactante figura y aquí te los mencionaremos. 

Trucos de Dwayne Johnson para lograr una figura musculosa 

En primer lugar, Dwayne Johnson inició contratando a un entrenador personal, Dave Rienzi, cuyo objetivo era llevar al actor "a un nivel completamente nuevo". Para esto aplicó una serie de ejercicios con los que pudiera entrenar sus músculos y de esa manera evitar el relleno en el traje, un truco que muchos otros intérpretes utilizan para dar vida a personajes tan fuertes como el antihéroe, Black Adam. 

Según lo publicado por el sitio web Sport, la clave se encuentra en llegar a la fatiga muscular tal y como Dave Rienzi ha confesado durante una entrevista con Insider: llevar el músculo al extremo exprimiendo cada repetición con una carga limitada de peso. La dificultad para ‘The Rock’ se encontraba en detener el movimiento justo en el momento en el que más tensión se produjera, creciendo así el tamaño del músculo. 

El entrenador personal instó al actor a hacer ejercicios isométricos, como alternar el curl de bíceps en cada brazo. Asimismo, apostó por las clásicas flexiones o dominadas. "Con los ejercicios negativos, controlas más el peso y tu cuerpo. Así te esfuerzas más, haciendo de esta técnica una de las más efectivas", aseveró.  

Dieta de Dwayne Johnson 

De acuerdo con GQ, Rienzi explicó que la alimentación de Johnson siempre estaba calculada, medían todas las comidas. Particularmente en el caso del actor “aumentamos los alimentos a siete comidas al día, ya que estábamos forzando mucho su físico, intentando que los abdominales estuvieran en su punto, que los cuádriceps salieran disparados y los hombros se mantuvieran firmes. Tomaba cerca de 500 g de proteínas al día, y añadíamos carbohidratos y grasas mientras buscábamos ganar masa muscular, y los reducíamos cuando se adelgazaba”.