Betty White fue considerada como una de las actrices más queridas de Hollywood hasta el día de su muerte el 31 de diciembre de 2021, tan solo dos semanas antes de cumplir los 100 años. Su participación en el show ‘Las Chicas de Oro’ fue memorable, aunque no todos en el set de rodaje pensaban lo mismo. Ahora, el director de casting Joel Thurm ha publicado en su libro, ‘Sex, Drugs & Pilot Season: Confessions of a Casting Director’, el tenso ambiente que se vivió en el set de filmación de la famosa serie de los 80, revelando cómo la envidia y los celos terminó dañando la relación entre dos de sus protagonistas: Betty White (Rose) y Bea Arthur (Dorothy).

En el libro, Thurm comienza relatando que la actriz Estelle Getty empezó a tener problemas para aprenderse sus líneas, dado que estaba desarrollando principios de demencia, algo que el público asistente y la audiencia desconocía por completo. Debido a eso, Betty White solía dirigirse al público, entre toma y toma, y se llevaba el pulgar a la boca para expresar que Estelle había estado bebiendo y por eso no recordaba sus líneas. Como era de esperarse, los asistentes se reían al ver a White haciendo estos gestos sobre su compañera, algo que le sentó muy mal a Bea Arthur y a Rue McClanahan (Blanche), ya que consideraban estas expresiones de muy mal gusto. Sin embargo, la intención de Betty no era burlarse de Estelle, a quien quería y admiraba, sino intentaba que los asistentes no le prestaran atención al problema de salud de la actriz y pensaran que todo formaba parte del libreto.

La espontaneidad de Betty White era su sello distintivo, pero a Bea Arthur le molestaba muchísimo que su compañera se saliera siempre del personaje para aportar un toque extra de humor. White siempre quiso crear un buen ambiente en los sets de rodaje, algo que terminó convirtiéndola en la favorita de los fans y en la archienemiga de Arthur, quien no podía ocultar la envidia que sentía por la que en algún momento fue una de sus mejores amigas.

Betty White rompió el silencio: “Bea no me quería tanto”

Durante muchos años, se rumoreó que Bea Arthur no toleraba a Betty White, información que confirmó la propia actriz en una entrevista concedida hace más de una década. “Bea tenía una reserva. Ella no me quería tanto. A veces me consideraba como un dolor de cuello. Era mi actitud positiva, y eso a veces enfadaba a Bea. A veces, si yo era feliz, ¡ella se ponía furiosa!”.

Por su parte, el hijo de Bea Arthur indicó que su madre era muy profesional, así que le disgustaba ver que White no se tomara en serio su trabajo al bromear constantemente con el público asistente, interrumpiendo las tomas. “A veces Betty salía y sonreía y charlaba con la audiencia y literalmente iba y se hacía amiga de la audiencia. Creo que a mi mamá no le gustó eso. Se trata más de concentrarse o conservar su energía. Simplemente no es el momento adecuado para hablar con los fans entre tomas”, dijo.