Belén Esteban se hizo famosa por contar episodios de su vida con Jesulín de Ubrique de plató en plató, algo similar a Marta Riesco. La reportera de ‘El programa de Ana Rosa’ se hizo más famosa que la de Paracuellos, con quien mantuvo algún enfrentamiento. La pareja de Antonio David Flores se convirtió en el tema de la semana por la supuesta llamada a Rocío Carrasco, algo que no pudo demostrar. Por este motivo, se la silenció, de momento. Ha vuelto a su tarea de reportera y redactora. Ya no es colaboradora de ‘El programa de Ana Rosa’ ni ‘Ya son las ocho’.

‘Sálvame’ mostró un vídeo en el que se podía ver como Marta Riesco tuvo contacto con Luis Pliego y no con Rocío Carrasco, como ella contaba. Varios colaboradores de la productora Unicorn todavía defendieron a Riesco con esas pruebas, motivo por el cual Jorge Javier Vázquez abrió una guerra contra la productora de Ana Rosa Quintana.

Antonio David Flores con Marta Riesco

Marta Riesco desaparece totalmente de la pantalla 

Justo cuando la productora optó por apartar a Marta Riesco del foco mediático, ‘Sálvame’ dejó de hablar de ella de la noche a la mañana, como si no existiese. En ningún momento pidieron perdón por las mentiras de la reportera. Se habló de un despido, pero finalmente se optó por vetarla como colaboradora, no despedirla. De esta forma evitaban que se metiese en una nueva polémica que dañase a la productora de Ana Rosa. Será ella quien decida finalmente que pasará con la novia de Antonio David.

Marta Riesco llora MEDIASET

Según ha podido conocer BLUPER, la reportera ya no acude a la redacción situada en Telecinco. Desde la polémica no ha vuelto a pisar los estudios de Mediaset, se desconoce el motivo real. Ella se encuentra en las oficinas de la productora, situadas en el Paseo de la Castellana, a unos 10 kilómetros de MEDIASET.

Ella sigue cubriendo eventos, pero en esta ocasión su cara ya no aparece en pantalla. Ni tan siquiera su voz. En algún momento se puede escuchar como le pregunta a los famosos, pero nada más. Han vetado su cara y su voz.