Rosa Benito no perdona a ‘Sálvame’ por las risas a Chayo Mohedano. La joven intenta labrarse un futuro en el mundo de la música, sin embargo, su carrera está repleta de luces y sombras. Quiere seguir la estala de su tía Rocío Jurado, pero esa sombra es muy alargada. Sin embargo, los colaboradores del programa de Telecinco no son los únicos que se mofan de ella, también los usuarios de las redes sociales.
En estos meses de verano, todos los cantantes llenan escenarios por toda España. El pasado domingo Antonio Orozco ofreció un concierto en el Teatro Romano de Mérida que colgó el cartel de entradas agotadas. Entre todos los asistentes se encontraba Chayo Mohedano, ésta dio un efusivo abrazo al artista en el photocall del Stone & Music Festival. La reacción posterior del compositor de Mi Héroe fue muy comentada en redes sociales.
LA CARA DE ANTONIO QUE HASTA INTENTA HUIR CUANDO VA A ABRAZARLE ME AHOGO😂🤣😂🤣😂🤣🤣🤣🤣😂🤣😂🤣🤣😂🤣 pic.twitter.com/g85p7FGV74
— Lechuga Feroz ✵🔻🥬 (@lechuga_feroz) August 29, 2022
Las redes se mofan de Chayo Mohedano
"La cara de Antonio que hasta intenta huir cuando va a abrazarle. Me ahogo", escribió un usuario. Mientras uno ponía una cara de extrañeza, como si no la conociese de nada, otra regalaba una sonrisa de oreja a oreja, como si fuesen íntimos amigos.
"Pobre Antonio. Me parto con la cara que pone", "Si buscamos la palabra 'ridículo', sale la foto de Chayo. Y si buscamos 'trágame tierra' sale la foto de Orozco", "Pobrecito mi Orozco, qué mal rato ha pasado" o "Qué maravilla de vídeo por favor", han añadido otros usuarios en las respuestas del vídeo.
Chayo Mohedano acudió al concierto como invitada VIP, sin embargo eran pocos los que la reconocieron. Estuvo acompañada en todo momento por su marido, Andrés Fernández, y el VIP Mánager Raúl Castillo.
Raúl Castillo es una persona muy conocida en el mundo del corazón por ser íntimo amigo de Ana Obregón. También conoce desde hace muchos años a los Mohedano Jurado, hasta el punto de que acudió a la boda de Rocío Carrasco con Antonio David Flores. Chayo en Mérida se sintió como en casa.