La infanta Elena celebra este 20 de diciembre un cumpleaños agridulce. La madre de Victoria Federica cumple 59 primaveras. Últimamente, la hermana de Cristina de Borbón está mucho más seria de lo habitual, y es que no gana para disgustos, especialmente con sus hijos. Ahora que Froilán está más encarrilado, es Victoria Federica quien hace lo que le da la gana. La joven ha decidido sobreexponerse y no llevar una vida discreta, como todos los miembros de la familia Real. La relación entre ellas es cada vez más tensa. Discuten de forma habitual y se ven cada vez menos. "Hombre, no le parece propio de su condición de nieta y sobrina de Rey y quinta en la línea de sucesión a la Corona. Además, eso le provoca tensiones con Don Felipe y la propia Zarzuela. Es verdad que madre e hija tienen sus broncas, cosa por otra parte normal, pero de eso a que hayan roto su relación…", detalla una fuente a LOC.
Muchas cosas han cambiado en la vida de la infanta Elena, ahora está prácticamente sola. De hecho, cuando Victoria Federica y Froilán eran pequeños, ella aún estaba casada con Jaime de Marichalar y disfrutaban de ese día en Zarzuela junto a Juan Carlos I y Sofía. Ya se instalaban allí hasta Nochebuena donde se reunían con toda la familia.
Juan Carlos I siempre ha querido a la infanta Elena, padre e hija están muy unidos, es quien más se preocupa de él y acude a visitarlo a Abu Dabi. Su nieta, Victoria Federica, también es la favorita del emérito. Ahora está lejos y todo ha cambiado, no obstante, Elena irá a visitarlo.
La falta de química con Letizia rompió su relación con Felipe VI
La infanta Elena sufre por todos los miembros de su familia. Toda la familia Real está completamente rota. Estas Navidades también se ha separado su hermana Cristina de Iñaki Urdangarin, con quien mantenía una estrecha relación. No obstante, el mayor distanciamiento de Elena de Borbón es con su hermano Felipe debido a la nula química que existe entre ella y la reina Letizia.
Por petición de Letizia para salvar la corona ante las últimas polémicas que rodearon a Casa Real, Felipe VI se desvinculó de sus hermanas y no las ha ayudado en ninguno de sus problemas, por lo menos públicamente. El rey ya no quiere saber nada, ya les retiró hace años de la imagen de Casa Real. "Los hermanos no se llevan. Elena se vence del lado de su hermana, la infanta Cristina, más aún después de que ella fuera apartada de la Familia Real, que su hermano redujo nada más ser proclamado Rey. [...] Una decisión que a la infanta le causó quebranto económico, ya que los actos de representación le eran retribuidos por la Zarzuela a cargo de su presupuesto. [...] Si el padre ha sido y es un grave problema para el Rey, las hermanas contribuyen a un vacío familiar compensado por el respaldo por la consorte [la reina Letizia], que rechaza cualquier avenencia con sus cuñadas, a las que atribuye no pocos de los problemas que aquejan a la familia", escribe Zarzalejos.