Según ha informado el portal ‘People With Money”, el cantante canadiense Justin Bieber ha acumulado una fortuna de poco más de 285 millones de dólares (270 millones de euros aproximadamente). Debido a su inmensa fortuna, el intérprete de “Favorite Girl” cuenta con una gran colección de coches de lujo de diversas marcas reconocidas en el mundo del motor. Entre los modelos más exclusivos en la colección de Bieber destacan los siguientes: Cadillac Escalade, Rolls-Royce Ghost, Bugatti Veyron, Lamborghini Aventador, Porsche 997 Turbo, Mercedes-Benz Sprinter, Range Rover, Audi R8, Fisker Karma y varios modelos de Ferrari, la que era su marca de coches preferida hasta que un descuido le costó ser vetado completamente por la firma del Cavallino Rampante.
Aunque el intérprete dispone de un gran presupuesto para actualizar su colección de coches, lo cierto es que él no ha podido comprar ningún modelo de los últimos lanzamientos de la marca italiana debido a que fue incluido en la lista negra de Ferrari, causando que todos los directivos y vendedores de los concesionarios autorizados de la marca tengan prohibido venderle cualquier modelo de coche al artista.
Generalmente, este tipo de acciones es tomada por los ejecutivos de las marcas de coches de lujo después de que les hayan dado mala publicidad a algunos de sus ejemplares al chocarlo en estado de ebriedad, o haber sido confiscado por el departamento de policía al haber estado involucrado en cualquier tipo de delito. Sin embargo, a pesar de que el cantante no haya hecho nada de lo anterior, la empresa ha determinado vetar a Bieber de la marca al afirmar que él no le dio el cuidado necesario a su Ferrari 458 Italia.
Esta polémica surgió hace algún tiempo cuando el ex de Selena Gómez confesó en una entrevista que se olvidó de dónde dejó su coche después de haber salido de fiesta y tampoco se preocupó de buscarlo. Según fuentes cercanas al artista, el coche estuvo en el estacionamiento del Montage Hotel en Beverly Hills durante más de dos semanas. El personal del hotel no notó nada raro porque es habitual que algunas celebridades hagan eso. “Algunos famosos dejan uno de sus vehículos aquí entre sus estancias y así los tienen listos para usarlos en cuanto llegan al hotel. Todos asumimos que Justin había hecho eso”, contó un empleado del hotel. Días más tarde, el asistente de Justin lo recuperó y se lo entregó.
Cuando los directivos de Ferrari se enteraron de eso, decidieron vetar al cantante por su irresponsabilidad, afirmando que pensaron demandar al intérprete y quitarle el coche. Sin embargo, decidieron no ejercer ninguna acción legal sobre Bieber para no perjudicar la imagen de la marca, pero decidieron ‘cancelarlo’ de por vida, sin la posibilidad de llegar a ningún acuerdo para que pueda volver a comprar algún coche de esta marca en el futuro. Debido a la decisión de Ferrari, Justin Bieber decidió también vetar la marca de su colección de coches al subastar el modelo Ferrari 458 Italia (sí, el mismo que extravió) a través de la prestigiosa casa de subastas Barrett-Jackson en la ciudad de Scottsdale.