Es incontable el número de celebridades que deciden desaparecer de la noche a la mañana, y retirarse sin dar explicaciones. A lo largo de los años, ha habido muchos casos de famosos que, cuando llegan a la cúspide, optan por desaparecer, y librarse de la presión que soportan, y aprovechar la fortuna que han conseguido. Y Christina Aguilera estuvo realmente cerca de decidir poner punto y final a su carrera artística.
Lo cierto es que muchos ya ni se acuerdan de ella, y en los últimos años ha estado bastante desubicada, pues no ha sacado canciones con mucha frecuencia, ni se ha mostrado activa. Pero no ha emitido ningún comunicado oficial que anuncie su intención de retirarse, ni ha dado explicaciones a sus fans. La respuesta es simple, ha querido tomarse un tiempo, y sobretodo, en épocas de pandemia, ha preferido cuidar de su familia, y disfrutar de tiempo libre.
Algo que echó mucho en falta después de darse a conocer. Tras su ‘boom’, en 1999, con 18 años recién cumplidos, pasó a ser una de las cantantes más aclamadas e idolatradas. Eso, inevitablemente, hizo que tuviera que trabajar sin descanso, y le provocó un estrés enorme. Conciertos, grabaciones, entrevistas, promociones, sesiones de fotos… la vida de la americana cambió para siempre. Hasta que dijo ‘basta’.
Poco a poco comenzó a bajar su actividad, y en 2019, tras una tanda de 25 shows en Las Vegas, decidió pisar el freno, y levantar el pie el acelerador. Y a punto estuvo de poner punto y final a su exitosa trayectoria, después de dos décadas, y con un patrimonio de 160 millones de dólares. Desde luego, el dinero no es un problema para Christina, y podía vivir el resto de su vida sin preocupaciones, y permitiéndose todo tipo de lujos.
Tiene dos hijos, un chico, de 18 años, y una niña, de solo 7, y se ha dedicado a su crianza, sacando pocas canciones hasta la fecha. Pero los siete millones de seguidores que tiene en Instagram, y el afecto que siente por parte de sus fans, han hecho que Aguilera no quiera renunciar a su carrera musical todavía. A sus 40 años, aún es joven, y aunque haya tenido que dar un paso al costado, y dejar paso a las nuevas generaciones, todavía tiene energía para derrochar en los escenarios.
A pesar de que tenga 160 millones, y no necesite trabajar, algún día la neoyorquina regresará a la escena. Sobretodo, cuando la pandemia ya sea cosa del pasado, y esté completamente olvidada.
Sus admiradores pueden estar tranquilos: hay Christina Aguilera para rato.