Aunque los focos mediáticos parecían haberse desviado de Meghan Markle y el príncipe Harry, un nuevo giro de los acontecimientos revela un intrincado plan maestro que podría dejar a KO a Meghan. La atención pública, que parecía diluirse, se ha reavivado con el posible regreso del benjamín de Carlos III a suelo británico. Parece que Harry ha tejido una estrategia digna de Maquiavelo para recapturar la atención, la fama y, posiblemente, la fortuna que una vez tuvo, pero dejando en la sombra a su controvertida esposa.

Harry y Meghan Markle

Para nadie es un secreto que el matrimonio de los Sussex ha estado envuelto en un sinfín de escándalos y controversias desde su separación de la Familia Real británica en 2020. A pesar de su intento por labrar un nuevo camino en los Estados Unidos, su presencia mediática ha sido menos impactante de lo esperado, sufriendo un revés tras otro en la competitiva industria del entretenimiento. Las recientes cancelaciones de sus proyectos, como el contrato con Spotify, han dejado claro que la popularidad de antaño ya no les respalda. Sin embargo, parece que Harry ha comprendido de la peor manera lo vital que es mantenerse en boca de todos para garantizar el éxito de sus proyectos, incluso si es por razones negativas.

El juego de apariciones relámpago de Harry en Londres

La estratagema del príncipe Harry incluye visitas sorpresa a Londres cada vez que los Windsor convocan eventos de relevancia. Aunque su estatus en la familia real es incierto, Harry no desperdicia ninguna oportunidad para reclamar su lugar en las portadas de los medios británicos, tal como ocurrió en la reciente coronación de Carlos III. ¿Podría esto ser un intento de opacar a Meghan y recordar al mundo su conexión innegable con la realeza? Los expertos afirman que sí.

Harry en Londres

De hecho, todo parece indicar que el hijo pequeño de Lady Di está dispuesto a robar el protagonismo de los Windsor una vez más. Su regreso programado a Londres para los premios benéficos de WellChild coincide con los eventos planeados para conmemorar el primer aniversario del fallecimiento de la Reina Isabel II. Esta elección no solo desvía la atención de su familia, sino que también parece ser un movimiento calculado para mantener su estatus en el centro de la escena royal. Este viaje fugaz de Harry a Londres es solo una parada en su ruta hacia Alemania, donde será anfitrión de los Juegos Invictus a partir del 9 de septiembre. Meghan Markle también asistirá a este evento, el cual ganó popularidad en parte gracias a los Sussex. Sin embargo, ella volará directamente desde California a Düsseldorf.

Meghan Markle, ¿víctima de un plan maestro?

 La ausencia de Meghan en estos eventos solo agrega combustible al fuego de las especulaciones sobre los verdaderos motivos detrás de los viajes de Harry a Londres. Expertos en Casa Real afirman que el retorno de Harry a las tierras británicas no es solo una cuestión de sentimentalismo o nostalgia, sino un intento calculado de recuperar la atención del público y, en última instancia, mantener a flote su economía. Mientras Meghan Markle observa desde lejos, el príncipe Harry parece dispuesto a todo con tal de recuperar su antigua gloria y convertirse nuevamente en el favorito de los británicos.