Isabel Pantoja pasa sus peores Navidades, totalmente aislada. La tonadillera se enfrenta al peor año de su vida. Desde que entró en prisión, su vida ha ido cuesta abajo y sin frenos. A la cantante todo le sale mal. Este 2021 se ha quedado sin gira de conciertos, sin programas en televisión, enfrentada a Kiko Rivera y sin su madre, quien falleció el pasado mes de septiembre.
Son sus segundas Navidades más complicadas, y nuevamente las está pasando sin las personas más importantes. Su único gran apoyo es su tío Agustín. Tras la muerte de Doña Ana, se habló de una posible reconciliación entre Kiko Rivera e Isabel Pantoja, pero ésta no se ha producido. Madre e hijo no han vuelto a hablar tras el reencuentro.
Irene Rosales y Kiko Rivera hace dos Navidades que no van a Cantora. Meses atrás, era la colaboradora quien tenía relación con la cantante, pero ahora ya ni eso. Debido al aumento de contagios evitarán grandes celebraciones, pero estarán acompañados algunos días por la familia de Irene, que este último año también se despidió de su padre.
Raquel Bollo ha reaparecido en ‘Viva la vida’ para dar detalles sobre las Navidades de Isabel Pantoja. “Es un año difícil. No es solo el fallecimiento de su madre, sino lo que ya traía, que es el remate. Yo no he podido hablar con ella. La llamo todos los años, pero contaba que este año no íbamos a poder felicitarnos y lógicamente lo entiendo. Sé que Kiko no ha ido porque pasó la Nochebuena con Irene, pero espero que me dé la sorpresa de que por lo menos haya estado Isa”, expresaba. Es algo que desconocemos, pero de sobras es sabido que madre e hija nunca han tenido una muy buena relación. Ha sido siempre de idas y venidas.
Ricardo, otro de los colaboradores del espacio, dio más datos sobre la salud de Isabel Pantoja. “Su estado anímico no es bueno, dicen que está contenta porque va a empezar una nueva gira, pero la gente de su alrededor dice que no la ve tan contenta”, confirmaba.
Suso Álvarez, un gran amigo de Kiko Rivera, ha sido el último en dar detalles sobre la situación. El otro día le llamó para felicitarle las Navidades. “Yo hablé con él para unas cosas personales y lo vi muy estable y muy bien con Irene. Lo vi tranquilo. No creo que haya felicitado a su madre. Por lo que me ha contado su entorno, no existe la comunicación entre ellos de ningún tipo. Me cuentan que no hay contacto por ninguna vía, ni por Irene, que antes hacía de puente”, zanjaba.