Son duros momentos para Isabel Pantoja. La tonadillera ha vivido los peores años de su vida, sin contar cuando le tocó ingresar en prisión. Como todos los españoles, en 2020 hizo frente a una pandemia confinada en Cantora con su madre y su hermano Agustín. Estaba ilusionada con el estreno de su gira en Madrid, pero debido a las restricciones es el único concierto que se realizó. Lo peor llegó al año siguiente, su enfrentamiento con Kiko Rivera por la herencia de Paquirri. El DJ habló alto y claro en televisión y rompió relaciones con su madre, a día de hoy todavía no han recuperado el contacto. En septiembre de ese mismo año tuvo que despedirse de su madre. Y se habla de la tristeza de Cantora. La cantante está sola y hundida.
Estas navidades han sido especialmente tristes para ella. Una vez más sin su madre y sin sus hijos, especialmente con Kiko Rivera. Hace unos meses sufrió un ictus y el cantante le prohibió la entrada a su madre en el hospital, le dio un ataque de ansiedad al saber que estaba de camino. Ella tenía esperanzas de arreglar las cosas, pero siguen en punto muerto. El marido de Irene Rosales y sus hijas no se han pasado por Cantora, ni tan siquiera han llamado a la cantante para invitarla a comer. Isa Pantoja es quien ha dado el último dato de su salud: “Está mal, tenía esperanzas de encontrarse con él”.
Isabel Pantoja está completamente sola, no tiene ganas de celebraciones
"No tiene comunicación con mi hermano ni con Irene. Ella lo que me comunicó es 'No me importa que no tengan contacto conmigo, pero me tienen que llamar a mí porque yo soy su madre", ha dicho Isa Pi en El programa de Ana Rosa.
Isabel Pantoja está preocupado por el estado de salud de Kiko Rivera, que aunque le ha traicionado y le ha hecho mucho daño sigue siendo su hijo. "Tiene un cúmulo de cosas, de miedo, de susto. Ella lo que quiere es hablar con él", ha contado su hija. "Si mi hermano llama a mi madre, ella por supuesto que va a hablar con él. Yo estoy preocupada porque va a pasar las Navidades sola en Cantora”.
El año pasado debido al reciente fallecimiento de su madre no quiso celebrar absolutamente nada, ni tan siquiera con su hermano. Cantora no se decoró de Navidad, no existía. Se encerró en su habitación a cal y canto hasta que finalizaron estas fiestas navideñas. Nuevamente ha vuelto a hacer lo mismo.
Su hija Isa ya ha dejado bien claro que “mi madre no se encuentra con ánimos para juntar a la familia estas Navidades. Pero si ella quiere, iré a visitarla con mi hijo Alberto algún día”. Isabel Pantoja incluso ha perdido el apoyo de sus mejores amigos. Ni Raquel Bollo, ni Luis Rollan ni Chelo García-Cortés, les ha apartado a todos de su vida. Cantora es el sitio más triste del planeta.