Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa han roto su relación para siempre. A finales de año, uno de los más nefastos para el amor, la socialité confirmó a golpe de exclusiva, como siempre, su ruptura con el escritor. Una noticia que pillaba a todos por sorpresa, sin embargo, no era algo nuevo. El pasado verano, la filipina y el peruano ya tuvieron fuertes discusiones y éste se fue a su piso de Madrid. El 29 de noviembre fue cuando supuestamente la madre de Tamara Falcó echase fuera de su casa al padre de Álvaro Vargas por sus supuestos “celos infundados”. Él lo niega en rotundo. Fue él mismo quien decidió irse porque estaba harto de una vida de mentira. La vida mediática de Isabel Preysler y su entorno, como Tamara Falcó, no casaban con la personalidad de Mario. Ahora está mucho más feliz al lado de los suyos. De hecho, habría intentado incluso volver con su ex, de quien se arrepiente de haberse separado. Llevaban cincuenta años casados. El mismo año que se separaron celebraban las bodas de oro.

Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa efe

Mario Vargas Llosa se desvincula de las últimas noticias 

Mario Vargas Llosa intenta guardar absoluto silencio sobre todas las noticias que han surgido en estas últimas semanas. Él quiere desvincularse completamente de la prensa del corazón. Pero no lo consigue. Ha hablado en pocas ocasiones, solo en una ocasión desmintió que haya roto con Isabel por ataques de celos.

Mario Vargas Llosa congreso efe

En estos días es consciente que se ha hablado mucho de la supuesta nueva ilusión de Isabel Preysler. Un empresario de 70 años afincado en Sevilla. Se conocerían desde hace años, pero es desde hace unos meses cuando se han dado una oportunidad. Tendrían encuentros fuera de España, según ‘Socialité’. Si esto fuese así, la madre de Tamara Falcó habría conocido a este misterioso hombre cuando todavía mantenía una relación sentimental con el peruano.

Mario Vargas Llosa se encuentra muy molesto por la actitud de Isabel Preysler. No ha querido hacer declaraciones, pero aparece muy desmejorado de cara a las cámaras. Su entorno asegura que lo está pasando realmente mal. Ahora mismo solo quiere paz y tranquilidad. Es una persona mayor y solo quiere sumergirse en sus libros y recuperar el tiempo perdido con sus hijos, las personas más importantes de su vida, que ahora le protegen sobremanera.