Isabel Preysler comunicó el último día del año que su relación de ocho años con Mario Vargas Llosa había terminado para siempre. Ya en 2020 pasaron por una fuerte crisis pero arreglaron sus desencuentros. Sin embargo, hacia meses que la relación entre ellos se había hecho insostenible. Según la de Porcelanosa, que concedió una entrevista ese mismo día previo pago, la relación se rompió por los celos infundados del escritor. Por otro lado, el entorno del premio Nobel negó las afirmaciones de la madre de Tamara Falcó y desveló que el fin de la convivencia era por las diferencias entre los mundos a los que pertenecían ambos.
Mario Vargas Llosa no ha hablado directamente ante ningún medio de comunicación sobre Isabel Preysler, pero sí lo ha hecho de forma indirecta. También su entorno más cercano. El escritor ha conseguido desprestigiar a la madre de Tamara Falcó, que como su propia hija ha desvelado, no pasa por un buen momento.
Isabel Preysler estaría dolida porque las cosas no han sido tal y como se explican. La reina de corazones habla con periodistas amigos para defenderse y hacer daño públicamente a Mario Vargas Llosa. Sin embargo, el escritor tampoco se piensa quedar quieto. "Hay una historia de Isabel Preysler que no ha salido porque Mario Vargas Llosa no ha querido”.
Mario Vargas Llosa ayudó a Isabel Preysler en la economía de la casa
Según Federico Jiménez Losantos, la madre de Tamara Falcó y Ana Boyer tiene mucho que callar: "No ha salido la historia económica, que es la que te mata. Y no ha salido porque Mario no ha querido y ella lo sabe. Pero ella sigue diciendo que habla mal de mí...". El periodista hace referencia a las acusaciones de Isabel en las que dice que Mario no contribuyó en la economía familiar durante los ocho años que duró la convivencia. "Sí lo hizo, y de manera nada frugal". Y ha añadido: "El entorno de Mario no ha hablado de dinero y podría hacerlo. Dijeron que vivió como un rajá a costa de ella, cuando tiene mucho más dinero y gana más dinero que Isabel, en un año gana mas que ella en cinco”.
Los hijos y el entorno más cercano al escritor no están dispuestos a dejar que la reputación del premio Nobel caiga por las acusaciones de Isabel. "Que no sigan. Mario no va a hablar pero tiene tres hijos, varios nietos y hay una familia mexicana y ahí la gente habla mucho", ha dicho.