El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, pasaron la festividad de Acción de Gracias en casa de un amigo de la familia, en la lujosa isla de Nantucket, perteneciente al estado de Massachusetts, donde la pareja presidencial acude religiosamente en esta fecha desde hace 40 años. Pero tras las fiestas, el mundo esperaba con ansias la revelación de la decoración navideña de la Casa Blanca, que este año fue por todo lo alto.
Después de ganar las elecciones a Donald Trump el año pasado, Joe Biden no pudo celebrar la Navidad en la residencia oficial, por las restricciones propias de la pandemia. Por eso este año ha sido tan esperada la decoración de las fiestas de diciembre, cuyo inicio lo marcó el recibimiento del árbol de navidad, el pasado 23 de noviembre.
En un comunicado de la Casa Blanca, se indica que el título de la decoración de este año es ‘Regalos del corazón’ y se utilizaron 41 árboles de Navidad, luces de diferentes colores y figuras, más de 300 velas y unos 10.000 adornos. Los árboles y las coronas se iluminaron con 78.750 bombillas.
“Mientras celebramos nuestra primera temporada navideña en la Casa Blanca, nos inspiran los estadounidenses de todo el país, quienes, una y otra vez, nos recuerdan que nuestras diferencias son preciosas y nuestras similitudes infinitas”, dijo la primera dama Jill Biden sobre esta tradición, iniciada por Jackie Kennedy en 1961.
Uno de los detalles llamativos es una Casa Blanca a escala, elaborada con pan de jengibre, cuyo peso supera los 150 kilos. Está rodeada de una escuela, una sede de la policía, la estación de bomberos, una gasolinera, además de un hospital, la oficina de correos y un local de venta de alimentos. Es una manera de reconocer al personal de salud, maestros y empleados de alimentación, que no cerraron sus puertas durante la pandemia.
“Inspirados por los actos de bondad y las experiencias que nos levantaron el ánimo este año, las habitaciones decoradas de la Casa Blanca reflejan los Dones del Corazón que nos unen a todos: fe, familia, amistad, artes, aprendizaje, naturaleza, gratitud, servicio, comunidad, paz y unidad”, escribió Jill Biden en su cuenta de Twitter. La primera dama leyó un cuento de navidad a un grupo de niños en la Casa Blanca, titulado ‘Don't forget, God bless our troops', escrito por ella misma, que es una historia para ayudar a los más pequeños a comprender lo que se siente al crecer en una familia militar.
En las redes sociales, los estadounidenses compararon la navidad de los Biden con las de Melania Trump, calificadas como sombrías. Los primeros dos años que decoró la Casa Blanca recibió muchas críticas. Los internautas recordaron que en 2018, la esposa de Donald Trump llenó una sala de árboles de navidad en color rojo sangre descritos como algo salido de ‘The Handmaid's Tale’ o ‘The Shining’.
Jill Biden, junto al presidente estadounidense, encabezará el encendido de la Navidad en la Casa Blanca el próximo 5 de diciembre, en un acto que contará con la presencia del coro de gospel de la Universidad Howard University y la banda Downrange del Ejército de EE.UU, así como grandes artistas y celebridades.