Julia Janeiro es uno de los rostros más populares de este 2021. El pasado mes de abril, cumplió la mayoría de edad y los medios no pararon de perseguirla. Ver cámaras a su alrededor ya es algo habitual. No para de recibir llamadas para participar en programas de televisión o conceder entrevistas. Sin embargo, de momento su respuesta es no. Actualmente se aprovecha de su tirón mediático en redes sociales, donde es la auténtica estrella. En estos últimos meses su número de seguidores ha crecido como la espuma. Por este motivo muchas marcas se han interesado por ella. Pero esto también una parte mala que denuncian muchos famosos. Y es que gracias al anonimato que otorgan las redes, hay personas que se encargan de insultarles y esto es algo que Julia no piensa tolerar.
Julia Janeiro está harta de los ‘haters’. Además, no lleva nada bien las críticas. En más de una ocasión se ha enfrentado a ellos. Y ha tomado una decisión. La primera de todas, desactivar los comentarios para que de esta forma nadie pueda criticarla. La segunda, seguir los pasos de María José Campanario. Está dispuesta a denunciar a Instagram para que modere los comentarios que recibe.
María José Campanario ha sido la primera persona en ganar un juicio contra una red social, en concreto contra Facebook, tras dos años de peleas judiciales. La odontóloga decidió denunciar a la red social tras recibir numerosos insultos sobre su enfermedad en 2019. En un primer momento, solicitó que la plataforma retirara de la red todos los comentarios, y al no hacerlo decidió seguir adelante con su denuncia.
El juicio ya estaba programado para el 13 de julio de 2022 en el juzgado de Instrucción número 3 de Arcos de la Frontera, Cádiz, sin embargo, Facebook ha decidido no llegar a juicio. Ha llegado a un acuerdo con Campanario borrando todos los comentarios donde se la insulta. "Los comentarios eran de muy mal gusto y, sin duda, vulneraban el honor de nuestra clienta al llegar a cuestionar incluso el padecimiento de su enfermedad", explicaron sus abogados.
Julia quiere que Instagram, también propiedad de Facebook, haga lo mismo con los insultos que recibe ella, ya que no le parecen ni apropiados ni justos.