La seguridad en los conciertos es algo imprescindible, y, trágicamente, así se pudo comprobar en el último show de Travis Scott, en Houston. No hubo ningún tipo de control ni de vigilancia, y eso provocó que hubiera una avalancha que desencadenó el fatal desenlace. El resultado fueron ocho fallecidos, y más de un centenar de heridos graves, algunos de ellos, entre la vida y la muerte. Y no es el primer concierto en el que el marido de Kylie Jenner es denunciado por incitar a la violencia, y ser responsable de este tipo de tragedias.

Otra artista que tuvo una experiencia horrible en un show en directo fue Ariana Grande, aunque, en su caso, no tuvo la culpa de nada. Fue un atentado terrorista, que se saldó con 22 muertos, si bien, inevitablemente, comenzaron a surgir preguntas, pues, según la opinión de la gente, se podría haber evitado, en caso de que la vigilancia de seguridad hubiera sido mejor. A raíz de estas catástrofes, muchos han decidido blindar sus conciertos, y hacer que sean lo más seguro posible.

Por ejemplo, Lady Gaga. La norteamericana vive con una inseguridad y un miedo constantes, y eso, en la gran mayoría de ocasiones, juega a su favor. Porque despistes o errores no comete ninguno. De hecho, en la ceremonia de la toma de posesión de Joe Biden, el nuevo presidente de Estados Unidos, y en la que fue invitada a cantar, apareció ¡con un chaleco antibalas! Obviamente, estaba camuflado bajo su vestido, que era de Schiaparelli.

Muchos se quedaron impresionados por la elegancia y la belleza del vestido, que le hizo ser el centro de atención. Pero la cantante de ‘Alejandro’, más que ser la protagonista, lo que quería era no correr ningún riesgo, e irse sana y salva del evento. Por eso, pidió que el traje estuviera a prueba de balas, pues estaba algo asustada, ya que no sería el primer tiroteo que presencia. En un acto de esta magnitud, el miedo siempre es algo muy común.

Se reúne mucha gente, y en EEUU ya han presenciado más de un desastre, como el asesinato de J.F. Kennedy, o, por supuesto, el derrumbamiento de las Torres Gemelas. Gaga nunca se relaja en ceremonias tan multitudinarias, y siempre camina con pies de plomo. Por eso, prefiere prevenir que curar.

El vestido de Lady Gaga

Afortunadamente, siempre deja anécdotas curiosas, y nunca ha habido que lamentar historias tristes.

Lady Gaga no se olvidó de su fundación

Y Lady Gaga no solo aprovechó para lucir hermosa, y estar protegida en caso de un tiroteo. Porque también hizo promoción de su vestimenta, que tenía una paloma de la paz en el pecho, bañado en oro. Fue tan original, que poco tardaron en comprar un conjunto igual que el suyo, después de que Schiaparelli subastara tres modelos idénticos, pero de diferentes tamaños.

Todos se vendieron por un precio de entre 790 y 2.150 dólares, y fueron donados a la ‘Fundación Born This Way’, de Lady Gaga.