Todos conocemos a Santiago Abascal de sobras desde que irrumpió en el Congreso con su partido político, Vox. Pero no tanto a su mujer, Lidia Bedman, de 34 años. Ambos están realmente muy enamorados. Y además viven uno de sus mejores momentos personales y profesionales. No les va nada mal económicamente y se pueden permitir más de un capricho.

Precisamente, el pasado mes de julio aprovechando las vacaciones estivales, el matrimonio decidió mudarse a un impresionante chalet de 285 metros cuadrados, donde sus dos hijos tengan espacio de sobras para jugar y divertirse. Con 100 metros cuadrados de jardín, ubicado en Pinar del Rey. Es una zona privilegiada de Madrid. Se encuentra cerca de la calle Arturo Soria. Esta casa les costó la friolera cifra de un millón de euros.

Santiago Abascal/ EFE

Abascal ya estuvo casado en una ocasión, con su primera mujer tuvo otros dos hijos. Su relación se rompió en 2010. Lidia Bedman se podría considerar toda una influencer. Cuenta con más de 222.000 seguidores en sus redes sociales, donde es muy activa y nos enseña su día a día cargado de ostentación. Trabaja con varias marcas. Casi todas sus publicaciones son promocionales. También hemos descubierto sus dotes culinarios. Además es licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la universidad madrileña San Pablo CEU y tiene un máster en Dirección Comercial y Marketing así como en Comunicación de Moda y Belleza de Telva y Yo Dona.

Santiago Abascal y Lidia Bedman/ Instagram

Lidia Bedman también nos cuela en su historia de amor con Santiago Abascal. Precisamente, esta semana ha compartido unas fotografías donde se les puede ver aterrizar en Brasil. Lidia ha mostrado en sus redes la ventanilla del avión desde donde se veía el verde de la selva amazónica que atraviesa el país latinoamericano. Al salir del avión ha hecho una fotografía al político con su mascarilla y la maleta de mano. La ha acompañado junto a un emoji de corazón. Ambos han decidido tomarse unos merecidos días de vacaciones antes de las Navidades. Horas más tarde compartió las primeras fotografías en Brasilia.