Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler optaron por tomar caminos separados a finales del mes de noviembre. Según la socialité, la única que ha hablado de ello previo pago con su revista amiga, ella es quien le echó de casa porque estaba harta de sus “celos infundados”. Sin embargo, el entorno del escritor cuenta una versión bien distinta. El premio Nobel estaba harto de la reina de corazones y de Tamara Falcó. Le habían obligado a participar en la final de MasterChef Celebrity 4 y en el reality de Netflix de la marquesa. Él odia el mundo de la farándula, por eso siempre ha dicho que pertenecían a mundos opuestos.
El peruano se refugia en los suyos y es feliz. Por fin ha podido quitarse de encima una gran presión. No sabía como separarse de Isabel Preysler. Él nunca quiso casarse porque nunca tuvo claro que fuese su gran amor. De hecho, aunque no está contrastado que se inspire en su vida, en el relato ‘Los vientos’, Mario podría definir con exactitud su historia de amor con Isabel. El padre de Álvaro Vargas confiesa que lo suyo fue un “enamoramiento de la pichula” y no del corazón. Él continuaba amando a Patricia Llosa, la madre de sus tres hijos. La dejó tras celebrar los 50 años de casados. Se arrepintió. Isabel la sedujo cuando le entrevistó en los 80, sin embargo en aquel momento la socialité no quiso saber nada de él porque no era nadie. Le dijo que le llamase cuando fuese premio Nobel.
Mario Vargas Llosa se reunirá con Juan Carlos I en París
Mario Vargas Llosa ha recuperado todos sus compromisos y su verdadera vida, la que él desea. Alejado de los focos y en actos relacionados con la cultura con personas a su altura, y sin cámaras de por medio. El escritor ha vuelto a relacionarse con sus grandes amistades que le retiraron el saludo cuando entabló la relación con la Preysler. Eran famosos políticos y aristócratas, como el mismísimo monarca. Juan Carlos I y Mario Vargas Llosa se verán las caras el próximo 9 de febrero en París. Ha sido el escritor quien ha invitado al emérito a la ceremonia de acceso a la Academia Francesa, y éste no quiere perdérsela. A Juan Carlos I le acompañará la infanta Elena.
Mario Vargas Llosa y Juan Carlos I se conocen desde hace décadas. Concretamente, desde que el escritor obtuvo la nacionalidad española en 1993. A la primera persona que llamó para comunicárselo fue al entonces rey.
El escritor se relaciona con las personalidades más importantes de la jet set española, y sin necesidad de ir al lado de Isabel Preysler. De hecho, por culpa de ella las perdió a todas. Nadie quería acercarse porque siempre estaban los paparazzis cerca, no había intimidad. En cambio, la socialité se queda cada vez más sola. Sus amigos más cercanos estaban todos relacionados con el mundo de la farándula, como Boris Izaguirre. Ni punto de comparación.