Máxima de Holanda se convirtió en la reina consorte de los Países Bajos al casarse con el rey Guillermo Alejandro en 2002, convirtiéndose en la segunda consorte de una monarquía europea nacida en Latinoamérica, dado que nació en Buenos Aires, Argentina, con el nombre Máxima Zorreguieta, en 1971. De hecho, fue con ese mismo nombre que inició una relación de amor con un famoso chef, mucho antes de tan siquiera pensar que se convertiría en la reina de una nación.
De acuerdo con los biógrafos de Máxima, ella “no es la joven aristócrata y moderna, ni la jinete intrépida y aventurera, ni la economista brillante que nos cuenta la versión oficial”, sino “una persona común y corriente”. Por ese motivo, antes de comprometerse en matrimonio con el entonces príncipe neerlandés Guillermo de Orange, la joven argentina había mantenido algunos romances fugaces, entre ellos su relación con Max Casá, quien se convirtió en una especie de escape tras haber terminado una relación con su novio del instituto, el italiano Tiziano Iachetti.
Max Casá y Máxima de Holanda se conocieron en 1989, cuando ella estaba cursando el primer año en la UCA (Universidad Católica Argentina), donde se especializó en Economía. Y aunque él no fue el gran amor de Máxima, lo cierto es que tuvieron un bonito romance y disfrutaban su tiempo juntos preparando algunas recetas, dado que fue él quien le enseñó lo básico de la cocina y hasta le enseñó a preparar su propia versión de Pie de Limón.
Quién es Max Casá, el chef que mantuvo un noviazgo con Máxima de Holanda
Max Casá es reconocido por su paso en algunos programas como ‘Todo Dulce’, emitido por el canal ‘Utilísima’. También se ha desempeñado como escritor culinario, publicando varios libros como ‘Tartas dulces y saladas’ y ‘S.O.S. recetas salvadoras para toda ocasión’. Además, en 2004 condujo el programa ‘Por los caminos del vino’, en el que recorrió varias bodegas y viñedos de Argentina, conversando con varios sommeliers y expertos en viticultura.
Por muy extraño que parezca, Max Casá prefirió mantenerse alejado del mundo 2.0 y de las redes sociales, por lo que se sabe muy poco de su vida actual. De hecho, hace algunos años confesó que no participaría en un programa de telerrealidad, dado que ese tipo de exposición mediática “no le va mucho, tal vez porque yo he pasado por ese tipo de contextos y he visto el otro lado de la historia, en donde no todo es realidad. A mí me gustaría que hubiera más realidad”, indicó Casá en una conversación con el diario argentino ‘Los Andes’.
En la actualidad, Max Casá vive en la ciudad de Mendoza, Argentina, junto a su familia. Al ser la provincia vinícola por excelencia de este país sudamericano, el chef decidió instalarse allí para alejarse de la capital y poder impartir sus conocimientos en un instituto gastronómico que lleva su nombre, llevando un estilo de vida muy diferente al de su ex pareja, quien se ha convertido en una de las personalidad más relevantes en la escena royal.