Desde su divorcio con Paloma Cuevas, a Enrique Ponce le está costando levantar cabeza. El que fuera un fijo en todos los carteles de toreo no atraviesa su mejor momento. Tanto como para, según señalan algunas fuentes, tener que desprenderse de algunas de sus propiedades e incluso estar planteándose volver a torear.
Enrique Ponce fue portada de todas las revistas de papel cuché cuando se separó de Paloma Cuevas e inició una relación junto a Ana Soria. Fue su momento de gloria. Tan sobrado se vio que incluso decidió tomarse un respiro, abandonando incluso los ruedos.
Enrioque Ponce y Ana Soria / Redes Sociales
Ponce vende una de las parcelas de Cetrina por un millón de euros
Así anunciaba en Twitter en 2021, después de cerrar su cuenta de Instagram, que se retiraba por un tiempo indefinido: “A quienes durante más de tres décadas me han acompañado: Lo primero que quiero deciros es GRACIAS por vuestro cariño y apoyo incondicional, en especial durante este último año de pandemia en el que decidí defender la tauromaquia, tirar para adelante y devolverle al mundo del toro lo mucho que me ha dado. En este momento de mi temporada taurina 2021 he decidido hacer un alto en el camino y retirarme por un tiempo indefinido”.
Pero todo lo que sube baja. Y lo que ha descendido ahora como lo hace la espuma de un sifón es su nómina de ingresos. Tanto como para que, según apunta la revista Semana, el torero haya decidido vender una de las parcelas de la finca de Cetrina. Un terreno de 40 hectáreas con 3.000 olivos por el que, según la publicación, habría cobrado alrededor de 1 millón de euros.
Enrique Ponce se plantea su vuelta al toreo
Todo ello mientras, según apuntaba el medio 20 Minutos hace unas semanas, Ponce había decidido volver a torear. Según la publicación, Ponce estaría preparando una gira que le permita torear en las plazas más importantes de España. Sería una gira para despedirse a lo grande de una vez por todas. Y también para rellenar las arcas de nuevo.
Cabe decir que en el medio 'Cultoro' ya le pidieron su vuelta. “Porque un torero con la importancia general de Enrique Ponce en la tauromaquia merece una temporada de despedida. Aunque sean diez festejos en diez lugares clave para su trayectoria de tres décadas. La importancia que han tenido en su carrera cosos como Madrid, Bilbao, Valencia o Sevilla está fuera de toda duda. Tardes en Zaragoza, en Málaga, en Córdoba. Todas ellas plazas de primera categoría, porque esa es la categoría del personaje en cuestión. ¿No lo ven posible?”, publicaban hace un tiempo. Una petición a la que Ponce acabaría haciendo caso, pero parece que más por necesidad que por gusto.