Es inolvidable la imagen de una rubia en bañador rojo corriendo en una playa para salvar a alguien que se ahogaba. Era Pamela Anderson en ‘Baywatch’, la serie que la lanzó al estrellato y donde lucía despampanante, muy diferente a cómo luce ahora, varios años después, tras todas las cirugías que se ha hecho. La actriz fue captada por los paparazzis recientemente paseando por las calles de Malibú con su mascota y su esposo, sin una gota de maquillaje, mostrándose irreconocible a sus 54 años.
En las imágenes divulgadas por ‘Daily Mail’, se observa a la actriz caminando relajada por una localidad de Malibú, junto a su esposo Dan Hayhurst, mientras disfrutaba de una tarde soleada en la compañía de su mascota, un Golden Retriever que le seguía su paso. La exuberante Pamela Anderson, que en el pasado robaba todas las miradas, pasó inadvertida con un ligero outfit deportivo que incluyó vaqueros de estampado en azul y blanco y una sudadera semi transparente, acompañados de botines en gamuza blanca. Su icónica melena rubia platinada brillaba con la luz, en un look desenfadado de mechones que llevaba sueltos y con gran volumen sobre sus hombros.
Hace algunos años, la actriz levantó una gran polémica al asistir al Festival de Cannes con un maquillaje y un peinado que no le favorecen. Llevó en esa ocasión un vestido negro y el pelo peinado y sujetado con fijador hacia atrás. El maquillaje resaltaba sus pómulos y el rostro lucía bastante diferente de cómo se veía en sus series y películas.
La imagen de la protagonista de ‘Baywatch’ luce radicalmente distinta a la de hace unos años, cuando saltó a la fama. Pamela Anderson siempre fue conocida por su adicción a las cirugías estéticas para mantener la frescura y juventud en su rostro, sin embargo la apariencia actual es muy distinta de la que acostumbró a sus seguidores. La actriz es famosa por haberse puesto y retirado implantes de silicona en sus senos, por lo que no es ajena a la cirugía plástica y no teme a los retoques estéticos para frenar el paso de los años.
Pamela Anderson suma varias intervenciones estéticas tanto en su rostro como en el cuerpo y nunca lo ha ocultado. Además, el paso del tiempo evidencia sus cirugías y el cambio radical en su apariencia. Algunos medios locales aseguran que la actriz, de origen canadiense, ha gastado 10.500 dólares en cirugías plásticas que incluyen implantes mamarios, desde que era una adolescente; inyecciones de colágeno, en labios y pómulos; facetas cerámicas en los dientes y rinoplastia, entre otras.
En una carta publicada en el año 2017, la actriz se lamentó de que la sociedad siga hablando sobre el cuerpo de las mujeres. "No es que le importe a nadie, pero decidí cambiar mi cara y operarme los ojos. Este hecho no es relevante para nadie, pero que la mera posibilidad fuera discutida por los periodistas serios y se convirtiera en tema de conversación generalizada es una desconcertante ilustración de la confusión entre noticias/entretenimiento y la fijación social por lo físico", señaló Pamela Anderson.