Paz Padilla desapareció de Telecinco el pasado mes de enero. Hace casi un año que se produjo lo que ella considera una encerrona. Hacía tiempo que la dirección de ‘Sálvame’ quería quitársela de en medio por sus constantes polémicas y aprovechó su último vídeo, sacado de contexto, para enfadarla y conseguir que abandonase por su propio pie. Sin embargo, a los pocos meses, después de recibir su despido, la gaditana no se quedó callada y denunció a la productora del programa y al grupo de comunicación. No obstante, se llegó a un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
Telecinco recuperó a Paz Padilla con las mismas condiciones. Se mantuvo su contrato de exclusividad pero con una nueva cláusula que le permitía participar en espacios de otras cadenas. Hay que recordar que la actriz triunfa con su obra de teatro ‘El humor de mi vida’. Además, pronto la veremos como protagonista de ‘A todo tren 2’, las exitosas películas de Santiago Segura.
Ahora mismo volver a Telecinco es su mínima prioridad, trabajo no le falta. Si decidió demandar a Mediaset era porque vio cómo se vulneró su honor, y ha llegado a un acuerdo porque no le gustan los enfrentamientos.
Paz Padilla ataca a Mediaset mientras le buscan un nuevo programa
La semana pasada se la pudo ver en el programa de Joaquín Sánchez junto a Antonio Resines. Por Mediaset todavía no se ha dejado ver. "Aún tengo un contrato en Telecinco. Se están buscando opciones", dice la humorista sobre su futuro.
"Para nada soy negacionista y antivacunas, lo que quise decir es que la gente se protegiera, pero en diciembre sonó como que era algo muy extraño, porque la gente iba como si estuviera inmunizada y la vacuna no te inmuniza, evita que te pongas más grave, algo que en su momento también lo expliqué", insiste en El Mundo sobre la polémica que surgió tras su polémicas declaraciones en el directo de Anne Igartiburu.
Paz Padilla está encantada con trabajar en Mediaset, pero asegura que no volvería a ‘Sálvame’ nunca más. De hecho, no era feliz. Veía como todos los compañeros le hacían el vacío. Desde el primer día que llegó.
"Mi forma de pensar era tan diferente, mi forma de llevar la vida era tan distinta que creí que, de alguna manera, aportaba algo distinto al programa, como amor", reflexiona sobre el papel que jugaba en el programa de las tardes de Telecinco. "Yo siempre hablaba de amor y ellos se cachondeaban de mí, pero en un sitio donde la forma de tratar los temas es tan sensible, pensé que el amor ayudaba, hasta que dejó de ayudar (risas). Pero no es fácil, cuando tu discurso y tu camino es la armonía, la paz, la bondad, y luego vas al teatro y recibes tanto amor, te dices: 'Esto no cuadra, algo no encaja', pero pensaba que bueno, que ahí tenía que estar [en Sálvame] y que alguien a lo mejor me escuchaba".
A nivel profesional no le ha perjudicado presentar ‘Sálvame’, no obstante sí le ha afectado a nivel personal. "Me ha frenado a nivel personal, porque yo estoy en otra onda y es verdad que llega un momento en el que si no te vas, el universo te echa".