El 2021 fue especialmente difícil para Alba Santana. La hija de Mila Ximénez se despidió de su madre, que falleció a causa de un cáncer de pulmón el pasado verano, y de su padre, Manolo Santana, quien falleció hace un par de meses a causa de un paro cardíaco. La revista Lecturas sacó a la luz la herencia de la colaboradora de ‘Sálvame’. Ésta dejó a su única hija 3 millones de euros en efectivo, ya que ella no tenía ningún tipo de propiedad. Sin embargo, tal y como recoge la publicación, el tenista no le dejó absolutamente nada. Pero ni a ella ni a ninguno de sus otros hijos, un total de cinco. Ningún nombre aparecía en el testamento, no obstante, a estos les gustaría recuperar algunos objetos de su progenitor para tenerlos siempre de recuerdo.
Manolo Santana y Claudia / EFE
Sin embargo, la última mujer del tenista, su viuda, no mantenía una buena relación con ninguno de los cinco hijos y no piensa darles absolutamente nada, que ahora mismo está en su poder. Nunca se ha hablado bien de Claudia, ésta tiene una fama de mujer ambiciosa, tal y como la define A., un antiguo trabajador del club de tenis que fue propiedad de Manolo Santana, pero tras su delicada salud, Claudia cogió las riendas del negocio.
Los últimos movimientos de Claudia en el negocio
Esta fuente añade que "el club no pasa por sus mejores momentos, necesitaría hacer una gran reforma pero Claudia no tiene intención de gastarse el dinero que modernizaría las instalaciones. Su marido era el reclamo perfecto para atraer socios, pero su muerte supuso un handicap para captar nuevos afiliados. La concesión finaliza su contrato en el 2026 y, aquí, todos estamos convencidos de que Claudia no tiene la idea de de renovarlo".
Manolo Santana / agencia
No obstante, parece que Rafa Nadal y Novak Djokovic estarían interesados en la compra de los derechos de explotación en cuanto finalicen los derechos de la actual administradora.
Claudia Rodríguez consiguió apartar a los hijos de Manolo Santana de su lado y logró que el tenista firmase un testamento a su favor, dejando a los cinco hijos desterrados. La viuda posee todo el control de su patrimonio, incluso de esos famosos objetos personales. Claudia ha negado la petición de los hijos del tenista. Así que de momento no podrán hacerse con algunas de las raquetas con las que jugó en su época dorado, que estarían valoradas en miles de euros, ni con sus trofeos.