Las icónicas coreografías de Britney Spears marcaron un antes y un después en la industria del entretenimiento en la década de los 2000. Sus conciertos eran un verdadero éxito debido a su performance junto a su equipo de bailarines. Sin embargo, desde hace algunos años la cantante no ha vuelto a presentarse en un escenario, por lo que ha utilizado sus redes sociales para seguir haciendo lo que más ama: bailar. Y aunque estas publicaciones siempre suelen ser muy polémicas al recibir algunos comentarios criticando sus interminables vueltas y sus pasos alocados, lo cierto es que el baile se ha convertido en su mejor receta para combatir una enfermedad incurable.
Recientemente, la intérprete de ‘Toxic’ confesó que la tutela ejercida por su padre no solo le dejó problemas de salud mental, sino también una enfermedad incurable y muy dolorosa que ha padecido desde hace tres años. De acuerdo con una publicación en su cuenta de Instagram, Britney sufre de una lesión nerviosa en el lado derecho de su cuerpo. Esta enfermedad en permanente, por lo que ella aseguró que “no existe cura, excepto Dios”. En la publicación, la cantante explicó que este “daño en los nervios se producen a veces cuando no recibes suficiente oxígeno en el cerebro. Ese daño hace que partes de tu cuerpo se entumezcan”.
Britney reveló que todos los días sufre por los problemas físicos que le genera este daño en los nervios. “Me despierto como tres veces a la semana en la cama y mis manos están completamente entumecidas... Los nervios son diminutos y se sienten como alfileres y agujas en el lado derecho de mi cuerpo, se dispara hasta mi cuello y la parte que más me duele es mi cabeza. Me pica y da miedo”.
La ‘Princesa del pop’ indicó que lleva años padeciendo con esta enfermedad, pero que no había podido enfrentarla debido al shock que le causó su estancia en una clínica de salud mental en 2019. “Los últimos tres años desde que salí de ese lugar he estado en un leve estado de inconsciencia. No podía enfrentarlo...”, aseguró.
Los pasos de baile de Britney Spears: la mayor crítica de sus haters se ha convertido es su mejor terapia
En medio de todo el dolor que siente, la cantante ha señalado que el baile se ha convertido en su mejor terapia, dado que le ayuda sentirse mejor cuando siente que ya no puede más: “Cuando bailo no siento el dolor... es como si mi mente literalmente fuera a un lugar de mi niña interior. Y aunque ya no me muevo como solía hacerlo, realmente creo que mi fe me dio fuerza... por la gracia de Dios finalmente encontré un medicamento en el que realmente siento que el oxígeno va a mi cerebro a través de mi cuello... mis ojos están más abiertos ahora y puedo sostener mi cabeza erguida correctamente”. Además, indicó que está mejorando poco a poco y está enfocándose en hacer un buen trabajo para seguir con su recuperación física y mental.