La recién nombrada mil-millonaria Rihanna es una de las artistas más aclamadas de los últimos años. Su trayectoria musical y su reciente éxito como empresaria la ha catapultado a la cima a sus 33 años.
Además de su pasión por la música y los negocios, la cantante también ha sentido interés por el sector inmobiliario, y a lo largo de toda su carrera ha adquirido impresionantes mansiones, villas y pisos de lujo donde ha vivido los últimos trece años.
La primera propiedad de lujo de la cantante fue una mansión de lujo valorada en 5.9 millones de euros. Esta propiedad está ubicada en Beverly Hills, en Los Ángeles, California. La espectacular mansión contaba con tres pisos, tenía ocho dormitorios y 10 baños y una superficie de más de 791 m cuadrados. La cantante la compró cuando solo tenía 20 años y varios años después la vendió a un precio menor por algunos daños causados por humedad.
De gran propietaria a gran inquilina
Después de vender su primera mansión, la “Badgirl” decidió alquilar una imponente mansión ubicada en Pacific Palisades, California. Esta propiedad tenía un precio de alquiler de 55.700 euros al mes, y contaba con siete habitaciones y nueve baños.
La artista decidió comprar una villa en Barbados, después de mudarse de Palisades, California. La villa tiene cinco habitaciones tipo suite, piscina, gimnasio privado y varios vestidores. Además de la villa, la cantante decidió tener a su madre como vecina al comprarle una casa de 5 habitaciones muy cerca de su mansión de lujo.
En el año 2013 decidió mudarse a Nueva York. Alquiló un piso de lujo en el barrio de Chinatown y pagaba por él 43.000 euros al mes. Al pasar el tiempo decidió regresar a California y adquirió una propiedad en Sunset Strip, la casa es conocida como “La Fortaleza” y se convirtió en su templo de privacidad. También compró un pequeño, pero elegante, apartamento en California, específicamente en Wilshire Corridor que le costó casi 800.000 euros.
En 2017, Rihanna compró otra mansión en California, esta vez en Hollywood Hills, que le costó alrededor de 5.8 millones de euros y aunque ya no vive ahí, aún es de su propiedad.
En el año 2018 la cantante se fue un tiempo a Londres y decidió alquilar una casa histórica del siglo XIX en el distrito de St. John's Wood. Se cree que llegó a pagar hasta 86.000 euros al mes por vivir en esa lujosa casa.
Antes de la pandemia, la cantante alquiló una mansión en Los Hamptons, Nueva York. Sin duda alguna, el alquiler más costoso que pagó la artista, ya que pagaba más de 355.000 euros al mes.
Las últimas adquisiciones de Rihanna son dos mansiones en Beverly Hills, en Los Ángeles. La primera que adquirió tiene un valor de 11.8 millones de euros y la segunda 8.5 millones de euros.
Sin lugar a dudas la barbadense se ha convertido en una experta en el sector inmobiliario y seguramente logre sumar otras propiedades a su nombre muy pronto.