Aunque pasen los años nunca olvidaremos aquel beso de Iker Casillas a Sara Carbonero ante más de 10 millones de espectadores. Una relación que llevaban en secreto y tras la victoria de España en el Mundial, el deportista, muy receloso de su intimidad, quiso hacer pública. De ese momento grabado en nuestras retinas ya han pasado más de diez años y no ha tenido final feliz. El año pasado la pareja comunicó a través de sus redes sociales que se divorciaban.

Hace varios años que saltaron los rumores de una posible ruptura entre Iker Casillas y Sara Carbonero. Sin embargo, las enfermedades de ambos retrasaron esta decisión, y después llegó el Covid. En total, la periodista y el deportista hicieron pública su ruptura tras 11 años de relación y dos hijos en común. Precisamente, por sus dos hijos ambos han mantenido siempre una relación cordial. De hecho, el año pasado los vimos escaparse un fin de semana a Oporto. Probablemente, para arreglar algunos asuntos, ya que estuvieron viviendo allí varios años. Sin embargo, la prenda destapó la posibilidad de una segunda oportunidad.

Sara Carbonero / REDES

Sara Carbonero no quiere volver con Iker Casillas 

Nada de eso, Sara Carbonero no quiere volver con Iker Casillas bajo ningún concepto. Es historia, además no saldría bien. El amor eterno en una relación no existe y ellos lo han demostrado. Ahora han encontrado el equilibrio y se encuentran bien así. Durante este tiempo se les ha relacionado con otras personas. A la toledana con Kiki Morente y al madrileño con Rocío Osorno.

La relación de la entonces pareja se truncó cuando hicieron las maletas para irse a vivir a Oporto. En apoyo a Iker Casillas, Sara Carbonero se trasladó con él y los niños, pero esto supuso pedir una excedencia en el trabajo. Dejó de trabajar durante años y ahora no ha vuelto a recuperar aquella actividad.

Sara Carbonero / REDES 

El año pasado se desvelaron unos audios íntimas de Iker Casillas donde hablaba de su relación con Sara Carbonero, lo que supuso un importante distanciamiento entre ambos. El deportista confesó sentirse asfixiado con la relación.

Ahora entre ellos todo está bien, han sabido aparcar sus diferencias. Entre Sara Carbonero e Iker Casillas no hay nada y nunca lo habrá. Sin embargo, por sus hijos van a mantener siempre el contacto y una cordial relación. Son un ejemplo de comportamiento para muchas otras parejas.

A principios de este año, después de arreglarse un piso en Pintor Rosales, se desveló que Iker Casillas se habría comprado una parcela de más de 2.000 metros cuadrados muy cerca de la casa en la que vivió su amor con Sara Carbonero. De esta forma será mucho más fácil estar al lado de los niños, pero también de su exmujer. Parece que el deportista no se la puede quitar de la cabeza, aunque Sara ya haya pasado página.