Tamara Falcó vive uno de sus mejores momentos profesionales y personales. La marquesa de Griñón ha dejado atrás su fama de pija estirada a la sombra de Isabel Preysler para convertirse en un personaje en sí mismo. Desde que participó en ‘MasterChef Celebrity 4’ y se alzó con la victoria, la empresaria ha sumado un proyecto tras otro. Este verano ha colado a millones de espectadores en su día a día.
La celebrity ha aprovechado esta oportunidad para mostrar al pública su buena relación con Íñigo Onieva, de esta forma ha roto con todo tipo de rumores de infidelidad. Están más unidos que nunca y muy enamorados. Sin duda, el gran protagonista de su reality es su novio. No obstante, el pasado fin de semana ‘Socialité’ intentó desprestigiar la imagen del joven vinculándole a su ex. Hicieron públicas unas fotografías donde se veía al empresario a bordo de un yate en compañía de Lucía Guerrero.
Tamara Falcó ya negocia la segunda temporada de su reality para Netflix siguiendo los pasos de Georgina Rodríguez. Y es que la hija de Isabel Preysler dejó a los espectadores con ganas de más con su última escena. Durante los seis capítulos, Falcó preparó un menú de estrella Michelin para inaugurar la reforma del Palacio El Rincón, heredado de su padre. Sin esperarlo, Iñigo Onieva tenía una sorpresa para ella, pero nos quedamos sin verlo. Podría ser una manta para la moto o un anillo de compromiso.
La boda de Tamara Falcó, en la segunda temporada de su reality
Tal y como ha podido saber recientemente ABC, Iñigo Onieva le habría pedido matrimonio a Tamara Falcó. Una escena de la que habrían sido testigos ambas familias, incluso las cámaras, pero esta escena no verá la luz hasta una segunda temporada, que tendría como argumento principal la preparación del enlace matrimonial.
La pareja no ha querido hacer públicos sus planes de boda para julio de 2023. ABC ha hablado con los protagonistas y con algunos miembros de la familia, pero todos guardan absoluto silencio. Ni confirman ni desmienten.
Este verano el futuro matrimonio ha disfrutado de unas vacaciones de verano por separado. No obstante, al acabar sus escapadas se reencontraron en Sotogrande para disfrutar de la gastronomía.
La próxima semana, en concreto el 13 de septiembre, la pareja celebrará su segundo aniversario. Los dos se conocieron en un cumpleaños de una amiga en común y se enamoraron nada más verse. Confiesa que le había rezado a San Antonio con sus amigas para pedirle novio, “pero yo pedí que me llegara el de verdad. No ha sido una coincidencia que llegara Íñigo, tenía que ser”. Reconoce que no era el perfil deseado y que son muy diferentes, pero es una joya.