Tamara Falcó está muy enamorada de Íñigo Onieva. Ya han cumplido un año de feliz relación, pero de momento son cautos con cada paso. Empezaron a vivir juntos hace unos meses. De momento, tal y como confirmó Isabel Preysler, no piensan en boda. Ahora mismo se están conociendo. Lo que está claro es que la marquesa de Griñón vive su mejor momento profesional y personal. Sin embargo, se ha tenido que enfrentar en numerosas ocasiones a la prensa del corazón, debido a las supuestas invenciones sobre su novio. A éste le han adjudicado una imagen de mujeriego que no consigue quitarse. Se le ha relacionado con varias chicas cada vez que sale de fiesta con amigos.
Jorge Javier Vázquez ya le advirtió una vez, y lo vuelve a hacer a través de su blog en la revista 'Lecturas'. El catalán, que lleva décadas en el mundo de la crónica social, sabe a ciencia cierta que la relación entre Tamara Falcó e Iñigo Onieva no va a llegar a buen puerto. El presentador se ha atrevido a analizar la última presencia de la pareja y ha vaticinado su final. Concretamente, en el cumpleaños de Tamara Falcó. Una celebración que contó con lo mejor de las altas esferas.
Algunos de estos invitados denunciaron después en 'Sálvame' el clasismo asfixiante que reinó durante toda la noche. Se trataba de forma diferente a según que invitados, por no estar al mismo nivel. Tampoco se trataba con buenos modales a los camareros. "Allí era tanto tienes, tanto vales", explicaba un testigo de la fiesta. Jorge Javier Vázquez cree que esta celebración ha sido toda una falsa.
Jorge Javier Vázquez habla tras ver las fotografías del posado oficial. No le gustó para nada el rostro de Iñigo Onieva. Lo ve demasiado impostado. Con un halo que le indujo a pensar que no durarían mucho. Parece que el joven estaba más preparado para cortar con ella que pedirle matrimonio.
"Tamara celebró sus 40 años con una fiesta que sirvió como su primer acto público con su novio", comienza diciendo. "Él tenía cara de haber salido la noche anterior", añade Jorge para reincidir en su fama de mujeriego. A Onieva le gusta mucho salir de noche y lo suele hacer siempre con amigos, sin Tamara Falcó. Allí parece que se desinhibe. "Cuando los vi juntos me salió un comentario muy de madre: «¡Ay, qué mal va a acabar todo esto»', sentencia el catalán.
En las fotografías Iñigo Onieva se muestra discreto, en un segundo plano. El joven intenta estar a la altura de la familia más glamurosa del país. Sin embargo, deja claro que le viene muy grande. El joven quiere pertenecer a un mundo en el que no tiene cabida. El suyo es otro. No se le ve a gusto.