Tamara Gorro no pasa por un buen momento. La influencer comunicó la semana pasada que tomaba la decisión de separarse de Ezequiel Garay. Aunque de momento no iban a divorciarse, iban a darse un tiempo. La empresaria no ha querido desvelar los motivos, pero ha querido compartirlo con su familia virtual para acabar con especulaciones y rumores. Lo que menos quiere es que se le haga daño a Ezequiel y a sus hijos.

Pero quien no lo está pasando del todo bien es Tamara. Hace unos meses ya comunicó que se alejaba temporalmente de las redes sociales por una depresión. Ahora ésta podría haberse visto acentuada. La actual situación le está dando grandes quebraderos de cabeza. No sabe si continuar su relación con el futbolista o poner punto y final a la historia de amor. Apenas come y tampoco duerme. Su psiquiatra ha tenido que ajustarle la medicación para que al menos consiga conciliar el sueño.

Tamara Gorro / redes

Tamara Gorro y Ezequiel Garay / REDES

La dura situación por la que pasa Tamara Gorro 

Ella misma lo ha contado en sus redes sociales en un nuevo ataque de sinceridad. “Lo primero es que sé que entendéis que esté menos activa, es normal, estoy en mis horas muy bajitas (…) Evidentemente, desde que ha sucedido esto último mi psiquiatra me ha ajustado la medicación sobre todo para dormir porque no descansaba”, explica la influencer.

“Me tiene un poco buf, me estoy adaptando, cada vez estoy mejor. A la vez me he marcado un objetivo porque nos tenemos que permitir el estar mal, no hay nadie indestructible, también tenemos que tener un límite de decir hasta aquí y de ahí en adelante», subrayó Tamara Gorro en su perfil de Instagram.

En estos últimos días Tamara Gorro ha llegado a perder hasta 7 kilos. “He aprovechado este descanso para comer. He perdido muchísimo peso, el otro día cuando me pesé eran 7 kilos y una persona tan delgada como yo…os podéis imaginar”, se sinceró Tamara Gorro.

“Hablando con mi terapeuta de que la semana que viene es mi cumple, el martes, me he marcado ese día para ponerme unas pinzas y no dejar de sonreír y no cerrar la boca. Empezar cien por cien como soy yo, empujándome porque estoy flojita. La vida sigue, hay personas que pierden familiares y la vida sigue”, concluyó Tamara Gorro.