RTVE decidió resucitar OT del baúl de los recuerdos. El concurso se canceló tras varias ediciones en su paso a Telecinco debido a la baja audiencia. Fue todo un éxito en su primera edición donde Rosa López se proclamó ganadora. Desde entonces, la persona que se alzaba con el premio, también tenía el honor y la responsabilidad de representar a España en Eurovisión. Una vez terminado el concurso se ocupaba la dirección del grupo de comunicación y se le acusó numerosas veces de “tongo”. De hecho, son los años en los que España quedó en las peores posiciones que se recuerdan. No hay más que revivir el episodio del Chikilicuatre. Todo un despropósito.
En 2017, para sorpresa de todos los fans, RTVE rescató de nuevo OT. Allí conocimos a grandes artistas como Aitana o Lola Índigo, entre otros. Precisamente, de estas primeras ediciones también salieron cantantes como Alfred, Agoney, Amaia, Ana Guerra, entre otros. Con el fin del formato, que en esta ocasión duró tan solo tres ediciones, el ente público decidió crear un festival en el que se eligiese entre el público y un jurado la canción que representaría a España en Eurovisión. El año pasado fue todo un éxito con Chanel. Unas galas muy reivindicativas y cargadas de polémica.
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Todos los artistas que deseen participar pueden enviar sus candidaturas y un jurado decide que concursantes llegan a la semifinal. Curiosamente, entre los 18 de este año se encuentran algunos rostros muy conocidos por el gran público y los fieles seguidores de OT. Se trata de Alfred, Famous y Agoney. Aunque no son los que más votos tienen, son algunos de los favoritos. Curioso.
Cuando se filtraron los nombres de los semifinalistas, espectadores del formato y auténticos eurofans se volvieron a echar encima de la dirección del concurso por un posible “tongo”. Eso sucederá si finalmente ellos ganan. Saben perfectamente que les va a perseguir esa sombra alargada.
En su edición de OT tuvo oportunidad de ir a Eurovisión con su compañera Míriam Rodríguez. Era una de sus ilusiones, pero no estaba convencido del producto que defendía, poro ello pidió que no le votasen. Y así fue. Finalmente acudieron Alfred y Amaia que en aquel momento vivían un bonita historia de amor juvenil, pero no traspasó la pantalla.