Mientras el fútbol masculino se ha detenido durante un mes por el Mundial de Qatar que está a punto de empezar, la competición en el fútbol femenino no se detiene y este fin de semana hay un Barça-Alavés que los culés esperamos que sea una nueva victoria para los de Jonatan Giráldez. Y el jueves próximo, un Barça-Bayern en el Camp Nou, apasionante partido en Champions, donde esperamos que el público acompañe a las jugadoras azulgranas. En estos dos partidos estará, sólo faltaría, la maravillosa Aitana Bonmatí. La centrocampista de Sant Pere de Ribes enamora a sus muchísimos fans cada vez que sale al césped... y cuándo está fuera de él. En el campo, es única, formando un tándem invencible con la mejor jugadora del mundo, Alexia Putellas.
Y fuera de los terrenos de juego, a menudo regala imágenes impagables a sus fans. Lo hizo en verano, disfrutando de unas merecidas vacaciones en un lugar idílico, Ibiza, disfrutando del relax total, de las puestas de sol y de las playas. Lo hizo hace poco volviendo a su querido Sant Pere, o "Sweet home", como ella dijo...
Y lo ha vuelto a hacer ahora que ha dispuesto de unos días después del último partido. Al no formar parte de la selección española, renunciando ella y muchas compañeras a ir, no ha tenido que disputar estos días compromisos internacionales, cosa que ha aprovechado para hacer las maletas y coger un avión hacia Londres. Allí, la jugadora azulgrana ha visto en directo, por ejemplo, un partido entre el Tottenham y el Leeds United. También ha visto el Big Ben, ha visto el río Támesis en su máxima esplendor o ha montado en bicicleta por Hyde Park. Como ella dice, "I love this city".
Pero de entre todas las maravillas que se ha encontrado, una imagen romántica ha fundido la red, cuando ha ido a un bar y a ella y a quién fuera con ella les han puesto unos cafés con el dibujo de un corazón hecho con espuma. Amor en el café y amor como el que provoca ella en los fans azulgranas, rendidos a sus pies, ídolo de los aficionados.
Una imagen maravillosa, que nos recuerda lo que hace a menudo otro crack azulgrana, el portero del masculino, Marc André Ter Stegen, cuando le prepara el desayuno a su mujer. El alemán no pierde nunca las buenas costumbres que tiene desde que unió su vida a la de su querida mujer Dani y a menudo enamora a la red demostrando que uno de los pequeños placeres de su día a día tiene lugar cada mañana, justo después de levantarse, cuando prepara un romántico café a su pareja.
Como diría la popular serie, Café con aroma de culé.