El Barça Femenino continúa a velocidad de crucero tanto en la Liga como en la Champions. Después de la última victoria en el Johan Cruyff por 4 a 0 contra el Alhama CF ElPozo, ahora las de Jonatan Giráldez tienen dos citas europeas antes de cerrar el año. El jueves, en el campo del Benfica, y el día 21, en casa, contra el Rosengard. Dos partidos que tendrían que servir a las azulgranas para confirmar el acceso a la siguiente ronda, en una liguilla donde han ganado tres partidos y solo han tenido un pequeño traspiés en el campo del Bayern. El equipo sigue jugando de maravilla, y a pesar de la baja de su gran capitana Alexia Putellas, el resto de compañeras está respondiendo, también los nuevos fichajes. Las Mapi León, Lucy Bronze, Keira Walsh, Salma Paralluelo y compañía siguen enamorando a la afición azulgrana. Y si nos lo permiten, en En Blau, sentimiento compartido por muchos culés, tenemos debilidad por Aitana Bonmatí, una jugadora que recientemente recibió un homenaje por haber disputado ya 200 partidos con la camiseta azulgrana.

La de Sant Pere de Ribes es una jugadora descomunal. Talento despampanante, es el motor en en el centro del campo, la salsa que lo acaba de ligar todo, el alma de un equipo que se contagia de su entrega y de su clase a la hora de hacer pases que solo ella sabe ver o goles llegando desde atrás. Una jugadora top, de la que nos atrevemos a decir que aunque Alexia sea la mejor jugadora del mundo, ella no le va demasiado lejos. Futbolista total, sonrisa permanente de oreja a oreja, y una de las jugadoras preferidas por la afición. Probablemente, porque tiene detalles de crack. Servidor vio cómo en el partido contra el Madrid en la Champions de la temporada pasada, una vez acabado el partido, Aitana se quedó (y no exageramos) casi una hora más después del silbato final, encima del césped, firmando autógrafos y camisetas y haciéndose fotos con todo quisqui, haciendo felices a muchos niños y niñas, jóvenes fans que querían estar cerca de su ídolo. Y es que no hay nada que la haga tan feliz como ponerse la camiseta del equipo de sus amores y jugar para el público culé.

Dentro de los terrenos de juego, Bonmatí es maravillosa. Y fuera, también. Sus redes sociales son testimonio de muchas fotos preciosas de ella cuando no viste de azulgrana, disfrutando de relax en la playa, de vacaciones, paseando por su querido pueblo o de turismo un fin de semana por Londres.

Los aficionados azulgranas siempre la vemos así: cuando juega, con su característica cola recogida con una goma, para jugar mejor; cuando está fuera de los terrenos de juego, con su característica melena larga, lisa y morena. Hasta ahora. Porque Aitana ha pasado por uno de sus estilistas de cabecera, ha ido a la peluquería y se ha hecho un nuevo look espectacular. Ha pasado por una peluquería Iranzo y se ha hecho unas ondulaciones en el pelo que le queda de maravilla. Y los fans, rendidos a ella, le han demostrado todo el cariño que le tienen y le han dedicado los elogios que se merece.

Nuevo look para despedir el año. Seguro que le da todavía más fuerza para afrontar los dos partidos que vienen ahora en la Champions.