Alfonso Díez ha reaparecido. Este exfuncionario de la Seguridad Social nacido en Palencia saltó a la fama al descubrirse su relación amorosa con la aristócrata más famosa, rica y poderosa: Cayetana Fitz-James Stuart, la duquesa de Alba. Era el año 2008, Cayetana tenía más de 80, él 24 menos. Acabaron casándose en 2011, pasando por encima de las guerras familiares de esta saga tan conocida, y se convirtió en el viudo de la mujer más poderosa tres años después, en el 2014. A partir de allí, la figura de Alfonso se ha ido difuminando por voluntad propia. Pero de vez en cuando lo vemos en público, y siempre acostumbra a impactarnos: sobre todo por su afición a retocarse la cara.

Alfonso, con 73 años, tiene el cutis más terso, hidratado y recauchutado del panorama de celebridades nacionales. Hombre atractivo por genética (por eso se fijó Cayetana en el amigo de su difunto marido Jesús Aguirre), no parece contentarse con su aspecto exterior, y lucha contra el natural deterioro humano a través de métodos externos. Es una obviedad, no pasa nada. Quien sabe si es por vanidad o para mantener su estatus de soltero de oro: se le ha relacionado con la reina Sofía, incluso con Isabel Preysler. Normal: después de un pedazo de señora con tanto de poder, posesiones e influencia, solo le quedaba salir con reinas. Una literal, la otra figurada, la reina de corazones. En todo caso, y antes de que Díez se enfade, recalcaremos que ambos romances han sido enérgicamente rechazados. Pero el cartel de Alfonso continúa intacto.

Juan Carlos, Sofía y Alfonso Díez / GTRES
Alfonso Díez e Isabel Preysler / GTRES

Díez, todo hay que decirlo parece haber abusado de su tendencia a tratamientos, bisturíes y sustancias artificiales para rejuvenecerse. Ha atravesado el umbral entre 'el apaño' y el destrozo. Poca cosa queda ya del recuerdo que tenemos de él, o mejor dicho: su realidad actual retrotrae de manera vaga y testimonial en aquel Alfonso obnubilado por la duquesa de Alba. Ni siquiera parece la misma persona que el reportero catalán del 'Aquí hay tomate' y 'Sálvame', Miquel Serra, pilló a las puertas de su piso madrileño en el año 2020, pocos días antes del confinamiento por el coronavirus. Díez era así:

Alfonso Díez en 2013 / GTRES
Alfonso Díez con Carlos Fitz-Stuart Martínez de Irujo meses antes de la muerte de Cayetana / GTRES
Miquel Serra con Alfonso Díez en 2020 / Telecinco

Pues bien, vamos a la fotografía impactante que nos llega de una entrega de premios de aficionados a matar sádicamente toros, organizado por el modernísimo, plural y objetivo diario ABC. El photocall de la cita contó con una aparición fantasmagórica de Díez con rictus inquietante, tono de piel pálido, textura ultraprocesada, claramente asimétrico en las formas. Sobre todo en la zona de los ojos. Extrañísimo e irreconocible, lo mires como lo mires. Cierto que no ha dejado de ser una especie de galán de cine, sí, pero ha pasado de ser Clark Gable a Bela Lugosi. Y sí, Lugosi daba miedo. Alfonso, la arruga es más bella de lo que crees. Dale una oportunidad.

Alfonso Díez en 2024 / GTRES