La commedia è finita, Ana Obregón. Bien, en su caso tragicomedia. La actriz sufre una crisis reputacional notable, pagando las consecuencias del revuelo mediático generado a partir del nacimiento de Ana Sandra Lequio, su hija - nieta. Por una parte tenemos el creciente desinterés del público, traducido en las paupérrimas audiencias que va dejando en las diferentes cadenas de televisión que la entrevistan. Ni siquiera cuenta ya para TVE y las Campanadas de Fin de Año, cuando ha sido una estrella indiscutible hasta hace muy poco. Pero la cosa va más allá: empiezan a caer proyectos. Algunos millonarios. Y el motivo es que ya no se la creen. Alguna cosa se ha roto.

Algo tan frágil como la confianza: todo a raíz de la polémica con la Fundación Aless Lequio y los ingresos que Ana había comprometido depositar en sus arcas. Obregón habría cambiado de opinión y de número de cuenta donde facturar: ahora la destinataria final es una niña pequeña de menos de un año. Este es la última gran batalla que ha acabado de separar de manera irreconciliable a Ana de Alessandro Lequio, padre del difunto Aless y objetor a asumir el parentesco con la criatura, en oposición frontal a su ex. Lequio y Obregón se han tirado la porquería encima y la peor parte se la lleva ella. Con el dinero no se juega.

Ana Obregón, Aless Lequio y Alessandro Lequio / Instagram

Explica el digital 'Informalia' en exclusiva que una importante productora audiovisual, Grupo Ganga, está reculando en sus compromisos con la presentadora. "El proyecto "no está confirmado" que vaya para adelante, la viabilidad de la serie está ahora comprometida, en parte, por las controversias protagonizadas por Obregón". Se trata de una serie de televisión sobre la vida de Ana, y que fue anunciada dos años antes del lío de Ana Sandra. Es decir, en un momento reputacional muy favorable: una madre devastada por la muerte de un hijo joven. "Vuelvo a la ficción de televisión. Me hace ilusión poder compartir con todos que he decidido volver. He llegado a un acuerdo cono una de las mejores productoras de España. Me costaba entender que nadie apostara por mi vida, ya que mi único mérito es haber trabajado 40 años en mi pasión y haber compartido con todos vosotros durante muchos años una enorme colección de momentos dulces y amargos, de luces y sombras". La idea es que Obregón colaborara en el guion e incluso lo protagonizara. Una bomba.

Ana Obregón en el bautismo de Ana Sandra Lequio / GTRES

Todo apunta que Ana perderá este contrato tan goloso o que tendrá que renegociarlo, porque las expectativas ya no son tan optimistas y la sombra de la desconfianza sobrevuela su figura. Grupo Ganga es la productora creada por Ana Duato y su hijo Miguel Bernardeau, recientemente adquirida por una empresa mayor. La absorción ha generado nuevos objetivos en la empresa y el marrón de Ana Obregón no es una prioridad en este momento. Al cajón. Y todos sabemos qué quiere decir eso, sobre todo en un momento en el que cualquier famoso tiene la suya docuserie. Todos menos Ana. Ya la llamaremos.

Ana Obregón / EFE