Tras su año más complicado, marcado por la pérdida de su único hijo Álex Lequio, después dos años de dura lucha contra el cáncer, Ana Obregón se ponía delante de las cámaras para despedir el año 2020 desde la Puerta del Sol de Madrid. Una retransmisión, en compañía de la presentadora Anne Igartiburu, que consiguió reunir frente al televisor a más de 7,3 millones de espectadores, que se dice pronto. Pues muchas eran las personas que querían ver a la actriz dando la bienvenida al 2021, tras encajar su golpe más duro.
Una emotiva gala de fin de año en la que Ana Obregón, luciendo un vestido blanco de su amigo y diseñador Alejandro de Miguel, dedicó unas bonitas palabras a Álex Lequio, quien perdió la vida con solamente 27 años. "Cada año que he retransmitido las Campanadas desde aquí, he mandado un beso a mi hijo que me veía desde casa. Este año no puede ser y, con vuestro permiso, se lo mando al cielo", dijo Obregón, entre otras cosas, en recuerdo a su hijo Álex Lequio mientras hacia esfuerzos para contener las lágrimas. Este fue el momento:
"Lo más importante en esta vida es dedicar tiempo y amor a las personas que quieres". Así ha dicho adiós a 2020 Ana Obregón en #CampanadasRTVE, con palabras de su hijo Alex y un mensaje de superación y esperanza -> https://t.co/rnA9WStKYB Feliz 2021 pic.twitter.com/m1wadN1F0Y
— RTVE (@rtve) December 31, 2020
Una reaparición ante las cámaras, después de muchos meses ausente y alejada, que Ana Obregón no ha hecho de manera gratuita. Según se ha podido saber, la que fuera pareja de Alessandro Lequio se habría llevado un enorme pastizal por presentar las Campanadas en la televisión pública. Según el portal El Economista, la intérprete y bióloga más famosa de España, atención porque impresiona, se habría embolsado cerca de 40.000 euros por una retransmisión que apenas duró 20 minutos. Un sueldo con el que casi dobló el de su compañera Anne Igartiburu, valorado en cerca de 24.000 euros. Feliz 2021.