El programa de Ana Rosa ha liderado una campaña muy agresiva anti-Puigdemont. El 31 de enero vivieron el punto álgido con una bomba: dos de los cámaras grabaron unas imágenes que revelaban el contenido de unos mensajes de Carles Puigdemont al conseller Toni Comín, en los que decía que el plan de la Moncloa había triunfado y que los suyos le habían sacrificado. La presentadora era consciente de la repercusión que podía tener esta exclusiva, y por eso le sacaron jugo repitiendo los mensajes en bucle durante más de tres horas.

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Pero emitirlo y filtrar esta conversación ha tenido consecuencias. El abogado que representa a Puigdemont en Bélgica ha confirmado que se han querellado contra Ana Rosa y los dos cámaras que lo grabaron. Han denunciado una violación de la vida privada sin consentimiento y un robo de información, dos cosas que según el derecho belga constituyen un delito que puede ser castigado con penas de prisión de entre seis meses hasta tres años.

Ana Rosa tiene derecho a justificarse, sin embargo, amparándose en el derecho a la información. Y lo primero que ha hecho es estallar en Twitter. La madrileña se hacía eco de la noticia, compartiendo un enlace en el que se explicaba. Y a partir de aquí ha empezado a compartir mensajes de apoyo que sus seguidores le han ido enviando.

Pero aquí no se ha quedado, y es que no se ha podido privar de contestar algunos ataques y críticas con duras respuestas. Una Ana Rosa que ha sacado las uñas ante la denuncia y se ha reído:

¿Cuál de los dos derechos prevalecerá? ¿Cómo acabará la cosa?