La última vez que Ana Rosa Quintana entrevistó a Albert Rivera fue el 24 de octubre, todavía no hace tres semanas. Durante la campaña electoral del 10-N, la reina de las mañanas de Telecinco ha invitado a los dirigentes de los principales partidos políticos estatales. Y aunque no ha revelado nunca su voto, el último programa-masaje al presidente de Ciudadanos puede dar alguna pista. Sea como sea, después de las elecciones del domingo, el espectro político español ha cambiado: el partido naranja es casi irrelevante y su presidente ha dimitido y abandona la vida política.
Si Albert Rivera vuelve alguna vez a Telecinco ya no lo hará ni como líder de Ciudadanos ni como político. Cuando Ana Rosa se ha enterado, sólo podía hacer que lamentarlo: "Quiero que sepáis que a mí me da mucha pena que acabe así", ha explicado después de hacerse público el adiós de Rivera. La presentadora madrileña recuerda el papelón del expresidente naranja contra el independentismo, hundida: "Me da mucha pena porque la suya ha sido una lucha tremenda, sobretodo en Catalunya. Y es una pena que un político acabe así".
No queda demasiado claro si siente lástima por Albert Rivera o porque no sabe quién incendiará a partir de ahora la política catalana. Si se trata de la segunda opción, puede estar tranquila: el espacio que dejan el exlíder de Ciudadanos y su partido ya lo ha empezado a ocupar la ultraderecha de Santiago Abascal y Vox.