Quedan todavía unos cuantos días para las elecciones generales del 23 de julio, y para que empiece la campaña, aunque en este país nunca dejamos de estar en campaña. Pedro Sánchez ha empezado a desfilar por diferentes medios concediendo entrevistas. Igual que Alberto Núñez Feijóo. Pero unas palabras del primero han sulfurado a una presentadora poco acostumbrada a que le digan las verdades. Una Ana Rosa Quintana que echó fuego por las muelas hace unos días cuando oyó al candidato del PSOE hablar de "la derecha mediática". Decía AR de una entrevista de Sánchez en la Cadena SER: "Sánchez ha estado toda la legislatura en Moncloa atrincherado sin hablar con los ciudadanos. Y cuando ha hablado lo ha hecho con una prepotencia que ahora, al parecer, ha cambiado. Incluso en el tono". Quintana, especialmente furibunda con eso de derecha mediática...: "¿Pero qué coño es eso de la derecha mediática. ¡Qué se lo está inventando Pedro Sánchez! Estoy harta, os lo digo de verdad. Aquí hay cuatro colaboradores, cada uno con su forma de pensar. Esto es este programa, así que vamos ya a dejar de insultar. El presidente no debe insultar. Como tampoco hay que insultar a Sánchez".
Ana Rosa haciéndose la digna y la imparcial... Pero se le ve el plumero. Por mucho que ella se irrita cuando la ponen en el mismo saco que la derecha mediática, esta mañana de lunes ha tenido un lapsus que le ha traicionado el subconsciente. Y los espectadores se han dado cuenta. Ana Rosa estaba más preocupada de la elección cromática de su vestido que de hacer una buena entrevista... y despedirla como es debido. “Una semanita... en la que solo me voy a poder vestir de blanco. No te puedes poner azul, rojo, verde, fucsia...”, decía en relación a los colores corporativos de los diferentes partidos, y recordando que esta misma semana también entrevistará a Pedro Sánchez o Yolanda Díaz.
Después del habitual masaje en forma de entrevista, la presentadora tiene que despedir al candidato del PP. ¿Y qué le ha dicho?: "Le deseamos muchísima suerte. Ojalá entremos en una época en que los partidos de gobierno, que son dos, puedan llegar a acuerdos por el bien de todos. Muchísimas gracias, Feijóo. ¿Cómo le vamos a llamar? Porque feijoísmo... Se ha quedado con Feijóo, el apellido de su padre ha desaparecido”. Después, vuelve a ello: "“Ha sido (una campanya) un poquito larga, pero al final la palabra la tienen como siempre los españoles, así que yo animo a todo el mundo a votar. Muchísimas gracias, presidente, gracias por estar aquí". Iep... Muchísimas gracias, presidente. No muchísimas gracias, candidato. Quizás se ha referido a él como presidente de su partido. O de su escalera de vecinos. O directamente, era muy consciente de cómo le llamaba a Alberto Núñez Feijóo. Se han fijado los compañeros de Vertele. La red, harta:
Estaremos atentos a cómo despide Ana Rosa al resto de candidatos que entreviste en los próximos días.