Tener un ministro de Cultura a quien 'has enseñado' todo tu talento y que 'ha aprendido todo lo que sabe gracias a tus consejos' debe ser motivo de fiesta para una mujer que se quiere mucho a sí misma. ¿Que será ministro en un gobierno socialista y no de derechas? No pasa nada. Siempre que se trate de un chico Ana Rosa. Màxim Huerta es la nueva cabeza visible de la cartera de Cultura y Deportes, y sorprende su ascenso meteórico desde El programa de Ana a Rosa hasta el ministerio, pasando por una faceta bastante prolífica de escritor.
Para la toma de posesión del cargo, Huerta ha escogido un traje y corbata sobrio, nada estridente, que no pudiera recordar su pasado rosafúcsiacasiamarillo del chismorreo que llenaba su vida cuando presentaba codo con codo con Quintana hasta hace tres años. En cambio, quien ha optado por una camisa de colores chillones ha sido la presentadora: una blusa de color amarillo Piolín con puntos negros. Ana Rosa, satisfecha y encantada de conocerse.
Sólo le faltaban las gafas de sol para evitar los rayos de luz que desprendía ella misma. Ah, no. Que también las tenía. Fíjense en la mesa. Unos ministros "de Mediaset", como ella misma ha dicho, con la presencia de Huerta, "estamos orgullosísimos", y con el editor de Noticias 4, Miguel Ángel Oliver, nuevo secretario de Estado de Comunicación... "Pedirme alguna embajada, pedirme algo! Estamos muy contentos, es un orgullo. Se puede ser un intelectual como Max y presentar un programa de televisión. Cuando alguien, con mala leche, dice que ha hecho información del corazón... Max ha hecho de todo, información política, social, lo que tiene que hacer en cada momento, ha estado en el Vaticano, en informativos...". Mira qué bien. Si ha estado en el Vaticano, problema resuelto. Puedes ver el momento cliqueando en la foto:
Es extraño que Quintana no haya complementado la felicitación al ex presentador enseñando alguno de los tuits escritos sobre los independentistas:
Me cago en el puto independentista
— màximhuerta (@maximhuerta) May 29, 2010
Por mucho envoltorio que le ponga a Ana Rosa, la red no lo compra. De hecho, quizás Quintana todavía no ha entendido que gran parte de las críticas hacia Huerta vienen, precisamente, por su programa y lo que ella representa:
La frivolidad de los tiempos que vivimos quedan perfectamente acreditado cuando me tratan de vender a Màxim Huerta como un intelectual. Calro que es Ana Rosa Quintana quien lo afirma
— Luis Felipe Muñoz (@Rokko69_RM) 7 de junio de 2018
La cuestión no es si Maxim Huerta resulta poco serio por su perfil como periodista en el mundo del corazón. La ideología que sostiene el programa de Ana Rosa es de la derecha más rancia y conservadora. Huele a podrido.
— Lady Lazarus (@LadyLaz51565301) 7 de junio de 2018
Vivimos en un país donde el ministro de Cultura es Maxim Huerta, el mundial de fútbol lo comenta Camacho y la investidura del gobierno la retransmiten, Ferreras, Ana Rosa Quintana y Susanna Griso #cambioCarterasAR #LaCafeteraFeministras #GabineteSanchezESP #GabineteSanchezARV
— Triquiñuela (@rincon_pi) 7 de junio de 2018
"Si Maxim Huerta es Ministro. ¿ Porqué yo no soy Presidenta?". Estará pensando Ana Rosa. Sniff...
— Señor Roper (@SrRoper8000) 7 de junio de 2018
Por cierto, Ana Rosa no ha hecho ninguna mención a sus pechos, comentados por un tuit del mismo Huerta:
Las tetas de anarosa son de premio español. #galat5
— màximhuerta (@maximhuerta) April 15, 2010
Quizás el nuevo ministro de Cultura se inventa unos premios para galardonar a su ex jefa.