Ana Rosa Quintana tiene 65 años. Una edad con la que la mayoría de los trabajadores se retiran y pasan a la jubilación. Muchos desearían que hiciera exactamente eso, poner punto y final y desaparecer del mapa mediático. Pero no, ella sigue al pie del cañón en Telecinco, haciendo de altavoz de las derechas extremas y la extrema derecha. Bien, al pie del cañón siempre que no abandona el plató de forma sorprendente, hecho que, en tiempos de pandemia, cada vez pasa más a menudo. Que si se queda sin voz, que si tiene que hacer un test de antígenos, que si queda aislada por un contacto directo... Le ha cogido el gustillo a levantarse en pleno directo y largarse de Mediaset, dejando el espacio en manos de sus acólitos. Pues bien, este viernes 16 de abril lo ha vuelto a hacer: la habían convocado para vacunarse en el estadio Wanda Metropolitano, el campo del Atlético de Madrid (el equipo de sus amores, llevaba una bufanda). Y no ha faltado a la cita.
.@anarosaq llega al Wanda Metropolitano para recibir la vacuna de AstraZeneca: "No tengo ningún miedo. Me parece que soy una afortunada" #AR16A > https://t.co/ihCqUkHoc6 pic.twitter.com/O5cQWvnDXl
— Telecinco (@telecincoes) April 16, 2021
Tampoco, evidentemente las cámaras del programa, que han hecho una cobertura que ni las visitas del Papa. Han seguido todo el recorrido de la presentadora hasta el box de vacunación, la inyección con la polémica dosis de AstraZeneca y el 'postpartido', recogiendo sus primeras impresiones. Ha sido super interesante, y sólo le ha faltado decir "hay que ir vacuna a vacuna". No sabemos exactamente que esperaba: "ha sido muy rápido. No me he enterado". Vaya, quizás pensaba que Ayuso había fichado a Freddy Krüger o a Eduardo Manostijeras, o que justo al acabar le crecerían el pelo y las uñas, como al hombre (mujer) lobo. Quintana ha hecho de su turno de vacunación un espectáculo, porque ella es muy de dar ejemplo. Del bueno y del malo. Los espectadores se han tragado el publirreportaje y han opinado en las redes: muchas mofas como "le quedan dos telediarios" u "otro día sin hablar de Villarejo", palabras gruesas (que no reproduciremos para que el odio no gane al amor, según Colau) y sospechas de trato de favor.
¡@anarosaq recibe la primera dosis de AstraZeneca en directo! 👏
— Telecinco (@telecincoes) April 16, 2021
➡ Cumple así su promesa "para animar a todo el mundo a que no tenga miedo" #AR16A > https://t.co/Z7fmSRERjy pic.twitter.com/57KXQYObER
Ya podían haber aprovechado la jeringa y incluir algún remedio contra el extremismo 'cuñao' y el sesgo incorregible de la reina de los matinales de Telecinco. Nos parece, sin embargo, que la Ciencia haya avanzado tanto.