Alerta máxima en Telecinco. La estampida de los espectadores es sangrante. No, no es que tengan un elefante en la habitación, no. Aquí también hay hipopótamos, rinocerontes, mamuts. Las audiencias de la nueva parrilla están en caída libre. Muchos miran a Jorge Javier Vázquez y sus 'Cuentos Chinos', totalmente sumidos en la irrelevancia, pero mucho más gordo es lo de la factoría Ana Rosa Quintana. Su productora controla la práctica totalidad de la oferta diaria, pero a duras penas superan los dos dígitos. El caso más dramático es el de la matriarca, que ya ha bajado del 10% con 'TardeAR'. Hay quien intenta disculparla: que si es un nuevo formato en una nueva franja, que la reina de los matinales necesita consolidarse... Cualquier excusa es buena. Ahora, si echas una ojeada al resto de formatos, la sentencia es inapelable: fracaso.

Es la única manera de describir lo que está haciendo su sustituta, chica para todo y discípula más fiel y obediente, Ana Terradillos. La presentadora vasca, tan amiga de Villarejo como su ama, ha toimado el control de una joya de la corona: el espacio puramente de política de Telecinco, el altavoz de la derecha extrema y de la extrema derecha, de PP y VOX. Quintana hacía que aquello funcionara, ciertamente cada vez con menos empuje, pero el cambio a Terradillos ha sido mortal. 'La Mirada Crítica' ya ha caído al 9% y poco más de 200.000 irreductibles que la soportan cada mañana, y bajando. Especialmente en Catalunya, con un paupérrimo 4,9% y 19.000 pares de ojos y de oídos sufriendo durante hora y media. Dicen que sarna con gusto no pica, pero siempre hay excepciones a la norma. Ana júnior hace huir a los televidentes, incluso a sus parroquianos habituales.

Ana Terradillos / Telecinco

Decir que el paciente tiene muy mala cara no es exagerado. Ahora, que Terradillos seguirá la misma línea, ni cotiza. Ha vendido su alma a un ideario, a una causa y a una forma de entender el periodismo que, de tan descarada, es insostenible. El mejor ejemplo, esta misma mañana, cuando ha recibido a la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, en el papel de corderita degollada por todo aquello de los ancianos muertos en las residencias. Que no se utilicen las muertes políticamente, dice la creadora del "que te vote Txapote". En fin. Aquí lo más interesante es ver a la presentadora de un programa "serio" haciendo la croqueta en plató, soltando sandeces de tufillo machista y haciendo unos masajes de pies a su ídola que, sinceramente, hace que incluso los más papistas que el Papa apaguen el televisor y se pongan a hacer calceta. Una muestra:

Ana Terradillos e Isabel Díaz Ayuso / Telecinco

"Usted gusta, usted gusta. Gusta en la calle, gusta también en el Congreso, gusta..." La comunicadora se queda en blanco, consciente de que se está pasando tres pueblos. Pero ya le hacemos el trabajo nosotros, los compañeros nos tenemos que ayudar. "Ayuso gusta en este plató, productora, cadena y despachos. Nos gusta a los ayusers". La peste a cloaca es tan insoportable que claro, pasa lo que pasa: que te miran cuatro gatos. Y con la pinza en la nariz.

Patricia Pardo, Ana Terradillos, Ana Rosa Quintana y Joaquín Prat / GTRES

Terradillos y Ana Rosa se equivocan: TreceTV, Estado de Alarma y Intereconomía ya están inventadas. Quizás les iría mejor allí. Pero claro, no pagan tan bien. Y Ana, palabras literales suyas, "tiene que comer".